Aounung x Fem!Lectora
Malika, es la segunda hija de los Sully. Al tener que dejar sus tierras por culpa de la gente del cielo, conoce a Aounung, un chico de agua, el cuál, hará que su cuerpo sienta unas emociones que no había sentido nunca con nadi...
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Me levanté al sonido de muchos Metkayina gritando enfurecidos. ¿Qué habrá pasado?
Me dirigí al montón de gente que se encontraba al lado de al Mhaui de los líderes del clan.
Desde allí pude divisar a un tulkun, pero...estaba muerto
¿¡Qué sucedió?! Me dije a mi misma, acelerando el paso para llegar cuanto antes al montón de personas.
Cuando llegué, pude ver a mi hermano, Neteyam junto a mi padre, tratando de convencer a los Metkayina de alejar a los tulkun de el lugar.
- ¡!VIVEN CON NOSOTROS Y TODAVIA NO HAS APRENDIDO NADA!! - Dijo Ronal en un tono desesperante - ¡¡LA GENTE DEL CIELO MATÓ A MI HERMANA ESPIRITUAL, NO MECEREN NI COMPASIÓN NI PERDÓN!!! -
Roa, ese era el nombre de la pobre tulkun que había fallecido. Ella tuvo que pasar por muchos procesos de fertilidad para tener a su cría, y cuando lo consiguió, le arrebataron la vida.
La gente del cielo destruye, daña y crea q su gusto, sin pensar lo que puede o lo que no puede pasar con lo que hay a su alrededor. Su planeta está dañado, y es por su culpa, su madre tierra les dió todo; agua, vegetación, vida... Y ellos lo desaprovecharon, pero sin embargo, sus avances en armas y tecnologías nos ganan, y no creo que sea muy agradable pelear con ellos. Nunca he luchado una guerra, y nunca me gustaría hacerlo, porque sobrevivas o no, en una guerra todos perdemos.
- ¡!ESCUCHAD A MI PADRE PORFAVOR, EL DICE LA VERDAD!! - Gritaba desesperadamente mi hermano Neteyam
Conseguí visualizar a Tsireya, quién estaba siendo reconfortada por Lo'ak. Busqué a Aonung con la mirada hasta que lo encontré y sus ojos conectaron con los míos.
Vi como apartaba a las personas para acercarse a mí y agarrarme de los hombros.
- Las personas del cielo llegaron a nuestra tierra, han matado al tulkun de mi madre y a su cría, vienen por vosotros Ma' Mali - Dijo Aonung preocupado.
- Aonung, calma porfavor, debéis escuchar a mi padre, el ha sido parte de la gente del cielo, sabe cómo piensan y como actúan, porfavor Aonung...- Respondí yo
Él me miró dudoso unos instantes, pero después se alejó de mí para acercarse a su madre y susurrarle algo. Ví como la mirada de Rolan conectaba con mis ojos, para después dirigirse a Tonowari y decirle algo.
- Bien, Jake Sully. ¿Qué propones que hagamos? - Dijo Tonowari, a lo que todo el pueblo Metkayina se quedó callado.
¿Por qué le da la palabra a este traidor? Escuchaba susurros, maldiciendo la décision del Olo'eyktan.
Todos le tenían respeto, era cierto, pero no todo el mundo lo consideraba bienvenido aquí.
- Las palabras de tu hija, Malika, me han hecho entrar en razón, Jake Sully, y como parte de los Metkayina que es ahora, su opinión es válida, así que esta vez dejaré que TÚ digas que hacer - Completó la frase Ronal
