Despedida

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Narra Pedri

Maddy estuvo días sin salir y apenas comer.

Ninguno se movió de ahí, nos íbamos turnando para que no estuviese sola en ningún momento.

Y Mikky se encargó de que el maldito video se eliminase de todas las plataformas.

Fue a la policía y lo comunicó por redes.

Todo era un maldito desastre.

A mi me habían metido en un contracto con la periodista con la que estuve la otra noche.

Yo no quería nada de eso.

Quería estar al lado de Maddy, era lo único que me importaba en esos momentos.

Ni siquiera sabía como me hacía sentir eso.

Pero ahí estaba.

Ella no hablaba con nadie.

No dijo ni una sola palabra en todos esos días.

Hasta hoy.

Estaba yo en el sofá.

Los demás estaban entrenando y Mikky en el trabajo.

Cuando escuché que bajaba las escaleras.

Me giré de inmediato y me la quedé mirando.

Se había vestido con ropa normal, no llevaba el pijama, se había peinado y maquillado.

- Tengo que ir a la agencia. -fue lo único que dijo.

- Maddy, ¿estás bien? -pregunté intentando acercarme a ella.

- Solo llévame a la agencia y luego vete con tu nueva novia, estoy bien. -su voz era dura, no dudaba, no temblaba.

Joder.

- No es mi.. -intenté.

- Un contrato, sí, pero es tu novia, no yo, estaré bien aquí, solo llévame por favor. -las dos últimas palabras se rompieron en su garganta.

No contesté.

La acompañé a la maldita agencia.

Y a pesar de sus quejas y insultos, entré con ella.

Algo me decía que no iría muy bien.

La veía tan segura de sí misma y a la vez sabía que en cualquier momento iba a derrumbarse, no sabía que hacer, pero estar a su lado era lo mínimo.

- Quiero hablar con Sandra. -le dijo a la chica de la entrada.

- Maddy, no sabíamos que ibas a venir, ahora mismo la llamo. -la chica tecleó algo en su ordenador.

- ¿Estás segura de esto? -pregunté en un susurro solo para ella.

- Cállate, déjamelo a mi. -gruñó y di un paso atrás.

Esto me estaba matando.

- Maddy, corazón, por fin apareces. -la voz de una mujer nos llamó a todos la atención.

- Supongo que habrás visto el video, estoy aquí para asegurarte que eso no me va a hundir ni mucho menos. -habló claro y segura.

- Siento decirte que alguien como tu, con la reputación que acaba de salir a la luz con ese video, no puede estar en mi agencia. -sentenció la tal Sandra y a mi me hirvió la sangre.

Hija de puta.

- Ese video no me define, no fui culpable. -gruñó Maddy.

- Lo siento pero no, se acabó tu contrato, no te quiero cerca de mis modelos y mucho menos en mi agencia. -Sandra se cruzó de brazos.

Strangers +18 - Pedri GonzálezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora