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Jimin abrió lentamente sus ojos, acostumbrándose a la claridad que se colaba por la ventana de la habitación.

Trató de moverse para estirarse, pero sintió un peso sobre su cuerpo.

Cuando despertó por completo vio que Jungkook estaba prácticamente sobre él y solo pudo sonreír.

En la noche, Jungkook estaba a su lado durmiendo, ¿cómo había terminado así?

Se acurrucó contra el omega, quien tenía puesto solamente la camiseta de Jimin ya que en la noche había hecho algo de frío y era lo primero que encontró. El alfa olió a Jungkook profundamente y se regocijó al sentir su aroma cubriendo completamente al omega. Su alfa parecía orgulloso de haber hecho sentir bien al omega en la noche, quizás Jimin y su alfa habían encontrado por fin un equilibrio entre ambos.

—Kookie, despierta —Jimin susurro al oído de Jungkook haciendo que el omega se remueva entre sus brazos.

—No quiero, déjame dormir, alfa —el menor restregó su nariz en el pecho de su novio.

—Si no te mueves no puedo levantarme, amor —el omega gruñó derrotado y se levantó— ¿Quieres que tomemos una ducha?

—¿Juntos? —los ojos de Jungkook brillaron, su alfa no le dejaría solito.

—Claro —se dieron un beso corto y fueron al baño dentro de la habitación de Jimin.

El omega estaba sorprendido por lo grande que era la casa de los Park. Había estado ahí una vez, pero apenas entró y ahora que la vio con más profundidad le sorprendía mucho más.

Jungkook se quitó la camiseta de Jimin y se metió a la ducha cuando el agua estaba tibia. El castañito vio al alfa quitarse la ropa interior y meterse junto a él, el espacio era bastante reducido, apenas cabían ambos. El más alto soltó un suspiro cuando el agua relajó sus músculos, le dolía el cuerpo, se sentía todavía un poco cansado.

—¿Te sientes bien? —Jimin besó la espalda del omega y luego Jungkook se volteó.

—Estoy bien, ya no te preocupes —besó a su alfa en los labios y pronto sintió sus manos apretar su cintura. Luego bajaron hasta el culito de Jungkook y le dio un apretón juguetón— Te has vuelto atrevido de repente.

—¿Qué puedo decir?, tengo a mi omega desnudo frente a mí, me lo pones difícil —Jungkook rio con ganas y Jimin lo siguió.

Se besaron por un rato, pero el omega detuvo a su alfa para que terminaran de ducharse en paz.
Al salir ambos se envolvieron una toalla y volvieron al cuarto.

—Voy a prestarte algo de ropa, para que estés más cómodo —comunicó Jimin, en parte si quería que el omega esté cómodo pero ver a Jungkook con su ropa era de lo mas lindo para Jimin. Porque sí, Jungkook es alto, pero toda la ropa del alfa le quedaba inmensa.

Cuando el mayor se volteó para revisar su armario Jungkook fijó la vista en su espalda, sonrió satisfecho al ver que tenía un par de arañazos, aunque también sus mejillas tomaron un color rosado al recordar la razón.

Lo que el omega aún no había visto era que su clavículas y cuello no habían salido completamente ilesos de la situación.

—Ya encontré algo —Jimin le dio al omega ropa interior, un short y una camiseta.

—Gracias.

Se vistieron en silencio y luego bajaron para conseguir algo de comer.

—¿Te gusta? —Jimin le había servido una porción de tarta de manzana junto con una taza de café con leche. El omega tenía las mejillas llenas y las comisuras repletas de migas así que solo pudo asentir con la cabeza, el alfa sólo pudo sonreír ante la tierna imagen— Mi papá la hizo, cuando está aburrido hornea.

❝Tiny alpha❞ ✧ [JiKook] [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora