Triste [TanZen]

•Cap 1•

Tanjiro Kamado.

¿Por qué siempre Zenitsu está triste? ¿Qué le atormenta?

— Zenitsu, ¿Por qué estás siempre triste? — Le pregunté aprovechando que Inosuke estaba dormido

—Tanjiro... N-No e-es n-nada — Dijo con una sonrisa falsa

— Zenitsu, ¿Por qué me mientes? — Le pregunté

— N-No te m-mie-ento Tanjiro — Me dijo

— Zenitsu, tartamudeas cuando mientes, dime la verdad — Le dije, a lo que él se sorprendió

— S-Sabes que, t-tengo u-una cosa que h-hacer — Me dijo para salir corriendo

Zenitsu Agatsuma.

¿Por qué se tuvo que dar cuenta? Ahora ya no puedo desaparecer como si nada... ¡¿Por qué tengo que ser tan inútil!? Si literalmente puedo ocultar mis sentimientos con artes demoníacas, a partir de ahora, haré eso... Y así nadie me echará en falta... También podría eliminar los recuerdos de todas las personas que conozco, y que ya no me recuerden... Le pediré a mi padre que me ayude

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— ¿Se puede papá? — Dije tocando la puerta de su oficina  en la mansión infinita

— Pasa Zenitsu — Me dijo con su voz calmada - ¿A qué se debe tu visita? No me sueles visitar a menudo - Me dijo

— Papá necesito un favor — Le dije

— ¿Qué tipo de favor? — Me preguntó, su voz era calmada y cálida

— ¿Podrías ocultar mis sentimientos con artes demoníacas? — Le pregunté

— Vale hijo, ¿Pero para que eso? — Me preguntó

— Es que mis compañeros de equipo notan que no estoy de humor casi siempre — Dije un poco triste

— Ven Zenitsu — Me dijo para que me acercase y me dió un abrazo — ¿Es por tu pasado? — Me dijo en su abrazo, su voz cálida hizo que rompiera en llanto

— Si papá, ¿Por qué no puedo hacer nada bien? No sirvo ni para ser humano, ni para demonio — Dije mientras que mi padre me acariciaba la cabeza

— No eres inútil cariño, solo es que tus nervios te frenan — Me dijo para luego darme un beso en la frente

— Gracias papá, gracias por todo, por adoptarme, por hacerme demonio, ¡Gracias! — Dije entre sus brazos

— No iba a permitir que una cosa tan valiosa como tú, estuvieses siendo torturado, abusado y menospreciado — Me dijo apretando más el agarre de su abrazo

— Gracias — Dije secándome las lágrimas y alejándome un poco de mi padre — ¿Papá? — Dije y mi padre levantó la cabeza — ¿Cómo está mamá? — Le pregunté

— Pues está bien, cuidando de tus hermanas, pero bien — Me dijo

— ¿puedo pasar a ver a mamá-Enmu? — Dije haciendo ojos de cachorrito

—Vale... Está en el cuarto de Muem — Me dijo

— Vale, vendré a verte más seguido papa-Muzan — Le dediqué una sonrisa y fui a ver a mi madre y a mis dos hermanas; Muem y Ensan

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— ¿Se puede pasar mamá? — Dije tocándo la puerta del cuarto de Muem

— Claro, pasa Zenitsu — Me dijo y entré al cuarto

— Hola mamá-Enmu, Ensan y Muem — Dije dedicándoles una sonrisa

— ¡¿Cuántas veces te he dicho que no sonrías falsamente?! — Me regañó

— Perdón Oka-san — Me perdoné

— ¡¡Nii-san!! — Me gritó una niña de pelo negro y ojos celestes

—Hola Ensan — Le dije dándole un abrazo

—Nii-san no me quiere — Dijo una niña de pelo negro,rojo y turquesa con ojos rojos

— Perdona Muem — Le dije dándole un beso en la frente — Es que Ensan es más pequeña — Le dije — Ya me tengo que ir, Oka-san y Nii-san, hasta otra— Dije esto para salir corriendo de la mansión

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Llegué a la finca mariposa, donde estábamos recuperándonos de la misión del monte Nagatsumo, aunque pude matar al demonio, el veneno se extendió mucho, haciéndome 15cm más pequeño, y aunque tomo la medicina, esa es solo para eliminar el veneno y la caída de pelo.

— Genial, ahora mido 1,45m me he quedado pequeño, y con una costilla mal soldada. — Maldije en voz alta

—¿Tienes una costilla mal soldada? — Preguntó el peli-burdeo

"Mierda"—pensé—