capítulo cuatro.

1K 111 47
                                    

And yeah, I let you use me from the day that we first metBut I'm not done yetFalling for you, fool's gold
And I knew that you turned it on for everyone you've met
But I don't regret
Falling for you, fool's gold

And yeah, I let you use me from the day that we first metBut I'm not done yetFalling for you, fool's goldAnd I knew that you turned it on for everyone you've metBut I don't regretFalling for you, fool's gold

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Con una última mirada, volvió a abandonar aquella casa, volvió a irse sin luchar, volvió a dejar a Felix llorando por él y con el corazón nuevamente roto. Todo volvió a repetirse. Como hace 6 años...

Sin embargo, el sonido de un motor arrancar fue sustituido por el de una puerta siendo abierta y cerrada con fuerza. Un Chan parcialmente empapado, frente a un Felix con su suplicante corazón en las manos, se observaron mutuamente.

-Hace años hice mismo, me marché contra mi voluntad y ya no quiero hacerlo más-expresó con la tristeza nadando en sus orbes verdes.

Las manos de Felix comenzaron a temblar.

-No...-Murmuró con miedo en su voz.

Chan avanzó varios pasos hacia Felix y tomó sus manos, sus corazones latían con fuerza. Los lagrimales de Felix observaban al parcialmente empapado hombre frente a él, con esa misma cara de niño asustado y esos ojos de un verde brillante, lo que no sabía que aquellos ojos brillaban por él.

-Nunca en mi vida he creído en nada, ni en dioses, ni en ángeles. Nunca había creído en nada; hasta que te conocí y desde entonces, creo en nosotros Felix. Siempre lo he hecho.

Felix zafó sus manos del agarre de Chan. - Ya es tarde...

-No lo es y tú lo sabes. No tengas miedo de admitirlo.

Felix adquirió una postura firme ante Chan, algo en su interior estaba cediendo y no podía permitir tal cosa. No tenía el derecho de permitírselo.

-Te pregunté si serías capaz de cambiar por mí, tu respuesta fue que no era posible y Chan, no importa cuánto te ame, eso no significa que voy a permitir que me dañes o que voy a estar dispuesto a aguantar tus majaderías-respiró profundo y se alejó del rizado-. ¿No lo has comprendido aún? ¡Cada vez que me lastimas, esa herida se queda y duele como el infierno!

Chan se quedó pensativo por unos segundos mientras su mirada lucía perdida en el rostro de Felix.

-¿Cómo crees que voy a lastimarte una vez que te tenga? -volvió a romper la distancia entre ambos.

-Como lo has hecho desde que me conociste...-expresó con cansancio en su tono de voz-. Además, nada me asegura que no lo harás otra vez...

Tenía miedo, estaba aterrorizado de abrirle su corazón al rizado y luego vivir un infierno. Aceptarlo significaba mandar a la mierda a Hyunjin y su matrimonio, que todo lo que había vivido en Estados Unidos y dar su hija en adopción fue en vano. Ya era mucho lo que había puesto sobre la mesa de apuesta para conservar su vida perfecta con Hyunjin para ahora, decidir que quería vivir su amor con Chan, había muchas heridas de por medio para hacer borrón y cuenta nueva. No podía simplemente olvidarlo...

hold on, i still want you › chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora