School luv affair ♡ YoonTae

Lección nº7

Con discreción y cada uno por su lado, ambos se dirigen a la misma dirección, no pueden irse juntos por varias razones, la más importante es que son profesor y alumno y eso rompe como 50 reglas de la universidad.

Yoongi llega primero puesto que va en coche, y se da una ducha en lo que el menor llega a su apartamento, es rápido puesto que, no habrá mucha diferencia de tiempos.

Al salir se coloca una camisa ancha mal abotonada y unos pantalones holgados, eso de estar todo el día en traje, le agota. No llega a secarse del todo el cabello porque llaman a su puerta y cogiendo a Holly en brazos, se dirige a abrir.

Taehyung al verle con el pelo sobre sus ojos, la camisa abierta y el perrito, siente un ataque al corazón, llevándose las manos al pecho, de forma dramática. El mayor no puede evitar reírse, calentando el rostro del menor al escuchar esa risa dulce y divertida de su profesor, que se cuela exitosa en su corazón.

Los rodea a los dos con sus brazos y besa los labios finos de Min Yoongi, que le reciben encantado, como si no lo hubieran hecho antes.

- Pase, Kim – Susurra en sus labios – Estamos aquí para estudiar anatomía.

- Pensaba que daba clases de literatura, profesor Min – Ronronea, entrando divertido - ¿Es polifacético?

- Y muchas más cosas, angelito – Yoongi le palmea el trasero al pasar por su lado – Ya lo comprobará.

Taehyung se muerde el labio de forma traviesa, robándole el perrito y llenándolo de besitos cariñosos, antes de hacerlo con su profesor favorito. Sólo quería molestarle antes cuando le dijo que no lo era, pero está más que claro.

El profesor se va hasta el sofá, sentándose e indicando a Taehyung que vaya con él, que obedece al instante, poniéndose a horcajadas sin soltar al cachorro. Yoongi los observa enternecido, la imagen que tiene delante es tan dulce que le podría matar de diabetes. Taehyung dándole besitos de esquimal a su pequeño Holly es demasiado adorable.

Besa su mejilla repetidas veces, creando un ambiente demasiado romántico para los dos. El menor se deja caer en su pecho, abrazando más al cachorro y perdiéndose en el varonil aroma de Yoongi.

Cierra sus ojos, dejándose acariciar por él y abrazar, sintiéndose seguro por primera vez en demasiado tiempo.

- Eres tan pegajoso – Susurra, dejando sus labios en su frente.

Taehyung se espachurra más todavía contra él, repartiendo besos por la piel que se deja ver por la camisa. Ama la piel de su profesor, es tan suave como dulce, tan adictiva como peligrosa.

Agradece por primera vez, haberse distraído en aquella clase.

- Yoongi hyung – Dice contra su piel - ¿Podría quedarme así un ratito más?

El mayor asiente, dejándole descansar a gusto, parece que el pequeño no se siente bien cuando sale de la facultad, lo ha visto demasiadas veces como para saberlo.

No pasa mucho rato cuando lo escucha hacer soniditos adorables, descubriendo que se ha quedado dormido, lo observa detenidamente, está realmente precioso durmiendo, toda esa paz en su cara es digna de ser enmarcada en un lienzo para que la gente adore esa bella faz.

Al final, él se acaba durmiendo también, descansando su mejilla en la frente de Taehyung, abrazado a él con fuerza, como si no quisiera que se marchase jamás, hasta que el móvil del menor suena, despertándolos a ambos.

Taehyung se remueve en su sitio, sin querer salirse ahí, pero debe descolgar. Se levanta con pereza y coge el teléfono de su mochila, llevándoselo al oído sin averiguar quién es, cuando lo que escucha al otro lado lo despierta de golpe. Yoongi ve con claridad cómo la piel del menor palidece y traga duro.

Se levanta, preocupado por esa expresión de terror que hay en su hermoso rostro.

Cuelga y recoge sus cosas con prisa, dándose cuenta de lo tardísimo que es, Yoongi no entiende nada, no quiere que se vaya bajo ningún concepto, pero parece que lo que él quiera, está fuera de discusión.

- Me ten-tengo que ir, Yoongi hyung – Se le atropellan las palabras conforme se acerca a la escuela – Gra-gracias por lo de hoy.

- Eh, espera – El mayor le atrapa de la muñeca - ¿Te llevo?

- ¡No! – Ambos se asombran por el grito – Quiero decir, no, está bien, puedo ir andando.

- Taehyung ¿Qué pasa? – Yoongi agarra sus mejillas, ladeando la cabeza - ¿Quién te ha llamado para que te asustes de esa manera?

- Adiós, Yoongi hyung – El menor le besa de forma fugaz – Nos veremos mañana en clases, le extrañaré.

Y huye de allí, corriendo, debatido entre la preocupación y la vergüenza por decirle que le va a echar de menos, aunque no es ninguna mentira, puesto que, su profesor se está instalando de forma certera en su corazón.

Yoongi siente que su alma se va detrás de ese chiquillo, sintiéndose jodidamente preocupado por lo que le pueda llegar a pasar.

Durante unos minutos se siente tentado de salir corriendo detrás de él, llegar hasta dónde se encuentre el culpable de los hematomas, de las prohibiciones de las marcas y del miedo atroz que le tiene y reventarle la cabeza sin siquiera pensarlo.

- Lo acabaré averiguando – Masculla, cerrando la puerta – Yo te protegeré, angelito.