School luv affair ♡ YoonTae

Lección nº10

Taehyung entra por su casa, casi con miedo, como absolutamente siempre, se ha cambiado de ropa y duchado en los vestuarios de la facultad, puesto que, le aterra oler a Yoongi y a sexo.

Se dirige a su habitación en silencio, sacando todas sus cosas de la facultad para ponerse a estudiar literatura cuanto antes, quiere demostrarle a Yoongi que es un alumno aplicado que no se distrae con tonterías.

Escucha la puerta de su casa abrirse y ve con horror como su madre entra rauda a su cuarto, aunque pone una sonrisa satírica al verle ahí.

- Así me gusta, que estudies aquí y no en la facultad – Le dice seria.

- Sí, madre – Asiente el menor.

Suspira y se concentra en sus libros, aunque no puede evitar que su mente se deje llevar por los momentos con Yoongi.

"En unos meses más, podré decirte que sí" Piensa para sus adentros.

Dos semanas después de todo eso, los encuentros en casa del mayor y el despacho se han convertido en algo rutinario, incluso le ha ayudado con otras asignaturas, sus exámenes han mejorado también.

Pero el cuerpo de Taehyung pierde masa muscular a raudales, cosa de la que Yoongi se da perfectamente cuenta puesto que lo ve desnudo con asiduidad.

Ahora están en casa del mayor, preparando el examen de inglés que tiene mañana con Namjoon, cuando el estómago de Taehyung ruge y éste se pone rojo como un tomate, sacando una risa dulce de Yoongi.

- ¿Quieres que te prepare algo de merendar? – Le pregunta, agarrándole las mejillas – Además, deberías comer más, estás delgadísimo.

- No hace falta hyung – Niega con la cabeza – Estoy bien.

Aunque eso al mayor no le vale y se levanta a prepararle unas ricas tortitas con sirope de ágape.

Cuando las tiene listas, el menor las devora cómo si no hubiese probado nada más exquisito en su vida, tanto que sus ojos se cristalizan de la emoción. Se come hasta el último bocado, sin dejar nada en el plato.

- Y eso que estabas bien – Sonríe Yoongi – Ni las he llegado a probar.

Taehyung vuelve a sonrojarse, dándose cuenta de que ha sido un maleducado, pero la alarma en su móvil suena, indicándole que es hora de volver a su casa.

- ¿Ya te tienes que ir? – Pregunta con un pucherito – Podrías quedarte a dormir aquí alguna vez.

- Eso es imposible hyung – Le dice recogiendo sus cosas – No puedo dormir fuera de casa.

- Eres ya mayorcito para hacerlo ¿No crees? – Yoongi se levanta poniendo sus brazos en jarra – Sólo habla con tu madre y...

- He dicho que no, profesor Min – Taehyung le corta, poniéndose repentinamente serio – No es tan difícil de entender.

- No me hables así, niño – Le gruñe – Soy mayor que tú.

- Adiós – Dice Taehyung sin más, marchándose furioso de su casa.

Taehyung se despide con un portazo, para ir llorando silencioso de camino al inferno en el que le toca vivir, ha odiado cómo se ha ido de casa de Yoongi, pero el mayor ha tocado un tema excesivamente sensible.

Por otro lado, el pelinegro que tira del pelo enfadado, pero con él mismo porque sabe que esa conversación no debería haber sido así. Se ha dejado llevar por la frustración de no poder pasar más tiempo con Taehyung y le ha hablado bastante feo.

- Podría mandarle un mensaje y disculparme – Le dice a Holly - ¿Tú que crees?

El perrito le mira sin entender, como es lógico, moviendo la colita divertido esperando a que su dueño reaccione de alguna manera.

Después de que termina la tarde y medio entra la noche, por fin se decide y escribe no uno, si no como veinte mensajes disculpándose, donde se disculpa de todas las formas que conoce, pero ninguna le parece la correcta.

- Menudo profesor de literatura estás tú hecho, Min Yoongi – Se dice así mismo, revolviéndose el pelo.

Vuelve a decidir y al final no le manda nada, es mejor que el fin de semana transcurra con tranquilidad, los ánimos se calmen y las aguas vuelvan a su sitio.

- Todo estará mucho mejor el lunes ¿Verdad, bebé? – Le dice al perrito.

El lunes, sin embargo, Taehyung no aparece por la facultad, igual que tampoco lo hace el martes, crispando los nervios del mayor, que parece que si te acercas un poco a él, te quemarás sólo de rozarle.

Namjoon se acerca a su compañero con el semblante demasiado serio y Yoongi se teme lo peor en ese momento.

- Yoongi, vengo a comentarte una cosa de Kim Taehyung – El mencionado traga duro – Está en el hospital ingresado, no asistirá a clases por unos días.

- ¿Qué le pasa? – El pelinegro siente que se caerá por el temblar de sus piernas.

- Tiene una anemia muy grande y un principio de desnutrición, por lo que parece, no ha estado comiendo correctamente – Le comenta, apretándole el hombro – No soy tonto Yoongi, sé lo que os traéis entre manos.

- ¿Quién te lo ha dicho? ¿Su madre? – Le pregunta apretando los puños.

- No, me lo ha dicho Lee JongSuk, que fue a visitar a su hermano médico al hospital y se lo encontró reanimando a Taehyung en mitad de la sala de urgencias – Yoongi siente que le falta el aire.

- T-Tengo que ir a verle – Balbucea, conmocionado – Debo irme ahora mismo.

- No, iremos los dos, como representantes de la universidad – Le dice serio – Si está en ese estado tan perjudicial, Yoongi, tenemos que ir con cuidado para averiguar qué cojones ocurre, en especial tú.

Yoongi asiente, está mareado y tiene ganas de vomitar, sólo quiere ver a Taehyung y encerrarlo en sus brazos para que no le pase nada más.