Conoce a ELA

Conoce a Ela y sus sentimientos

Ela no solo había entrado en depresión en ese momento, estaba muy confundida, demasiado, es decir, las cosas iban bien ¿no? no había hecho nada malo para que se alejara de ella, le había dado su espacio cuando lo necesitaba, lo aconsejaba, trataba de no ser tan empalagosa respecto a sus sentimientos, entonces no había razón para que sus relaciones fracasaran ¿no? no era experta en relaciones, nunca había tenido una completamente oficial, pero si estaba segura de algo gracias a sus amigas. Los hombres eran unos idiotas. Y ella lo sabía con exactitud porque su padre lo era, sus hermanos, sus amigos y cualquier hombre que la rodeara, eran unos imbéciles, de eso no tenía la menor duda.

Pero si ya sabía eso ¿porque dolía tanto? dejo de vivir, su vida se puso en pausa, justo como la de Bella en crepúsculo cuando Edward se fue de su vida, y eso la hacía sentir idiota. También dejo de comer y comenzó a vivir solo por y para la universidad, solo lo iba a ver un semestre más y de ahí en adelante y con algo de suerte no se lo iba a topar nunca más en su vida, era su mantra y lo único que la mantenía con vida mientras no hacía más que tomar y vivir a base de agua y chicles de menta. Obviamente eso no duro mucho, como si fuese poético su cuerpo colapso frente al imbécil por el que estaba sufriendo, termino en urgencias y con supervisión de todos a su alrededor ¿sirvió de algo? Por supuesto que no, pero simplemente su cuerpo había olvidado alimentarse como era correcto.

Nunca entendió las red flags que sus amigas le dijeron que eran claras -de hecho, hasta este momento en el que se está desahogando escribiendo, sigue sin verlas-, creyó que era diferente y que iba a vivir con el hombre de sus sueños -gran spoiler, eso no paso- nunca nadie le explico la regla de los 3 meses y si no hubiese sido porque la vivió en carne propia, hubiera creído que era una estupidez -un spoiler nuevamente, no lo es- .

Entonces mientras sufría en silencio, un sábado por la noche en su cama llorando, se le ocurrió que escribir tal vez no era tan malo como había pensado.