Mi casi algo [INTENABO+18]

Capitulo 34

Horas antes.

--Yo no puedo hacerlo --comento Horacio-- Simplemente no puedo.

--¿Pero están seguros de esto? Debe haber otra solución... --hablo Volkov.

--No la hay --respondió Michelle-- esto tiene que ser asi, Gustabo tiene que morir, el FB ya esta en la ciudad y quieren llevárselo a una cárcel mas para gente de su tipo.

--¿Su tipo? --pregunto Horacio.

--Terroristas Horacio, Gustabo es considerado un puto terrorista. Ya no estamos hablando de putos hospitales psiquiátricos.

--Alguien debe hacerlo...

--Lo hare yo.

Michelle, Volkov y Horacio se voltearon para ver a Freddy Trucazo entrar en la sala de reuniones.

--Trucazo --saludo Volkov con un firme apretón de manos.

Michelle no decía nada, tan solo lo analizaba con la mirada, estaba realmente cansada y aunque entendía que era su error, ahora no estaba dispuesta a disculpare, esas mierdas de cursilería no eran lo suyo y aunque en algún momento lo fuese a hacer, no era el momento.

--Yo me quedare del otro lado del túnel con un francotirador, cuando vea que la cosa se pone complicada disparare a matar.

Michelle se puso de pie y paso a su lado deteniéndose un segundo antes de seguir.

--Gracias.

En la actualidad

Conway intento safarse del agarre de Volkov que cada vez lo ponía mas difícil, con los brazos se aferraba a un mas a su cuerpo, no en un abrazo sino en una traba de la que era imposible escapar. Miro a sus alrededores pues no entendia el accionar de Volkov, miro a Michelle que miraba hacia el frente con una mirada firme y una espalda recta, Horacio en cambio estaba junto a Michelle, le daba la espalda a Gustabo y se cubria los ojos con las manos.

Y fue ahí cuando lo entendio, cuando escucho el disparo y en cuestión de milesimas de segundos Gustabo tropezó.

El disparo no le dio tiempo de reaccionar a Gustabo, de moverse, de voltearse a ver que pasaba, sintió una punzada en su espalda un dolor que le quemaba la piel y un calor que ahora cubria su estomago. El impulso de un golpe ciego lo dejo de rodillas en el suelo mientras que en su ignoracia se llevaba la mano al vientre sorprendido de verla teñida de aquel rojo.

No se volteo, no miro hacia atrás teniendo la salida del túnel tan cerca, escucho unos pasos y Conway se poso a su lado, en su traje perfectamente pulcro y con las gafas puestas que se las retiro un momento para asi poder ver mejor a Gustabo.

--¿Que haces ahí en el suelo Capullo? anda, mueve el culo.

Gustabo se miro las manos, miro el suelo y alzo la mirada para ver a Conway que ahora estaba parado frente a él.

--¿Que esperas, te quedaras conmigo?

--Hasta que el sol deje de brillar...

Gustabo sonrió por inercia aceptando la mano de Conway que lo ayudo a ponerse de pie, ya nada le dolía, ya nada le molestaba, en su mundo sordo tan solo eran Conway y él caminando por el ultimo trayecto que queda del túnel hasta que se freno de golpe para darse la vuelta. Pero antes de poder ver lo que había a sus espaldas la mano de Conway lo detuvo obligándolo a mirarlo a él.

--No mires hacia atrás --Susurro Conway.

--¿Y Horacio?

--El luego nos alcanzara.

Gustabo miro a Conway, miro la profundidad en sus ojos, aquella compacion que le llenaba el alma. Simplemente asintio.

--Si, tienes razón.

Gustabo sonrió pues Conway le ofreció la mano para caminar, miro sorprendió aquel gesto, lo dudo por un momento y acepto, delineo la palma del mayor con sus dedo y luego entrelazo sus dedos.

--¿El mar es infinito?

--¿Que mierda de pregunta es esa? acabas de cortar todo el royo.

--Joder viejo, disculpe.

--No capullo, no te disculpo y no es infinito.

Fin