CAPITULO IV.

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Después de la celebración los días consiguientes Jake y Tonowari se centraron en establecer un plan de viaje por tres días: un día de ida, un día de estancia y otro día de venida; en ese plan estaban únicamente ellos cuatro contemplados. Tonowari y Ronal se presentarían con los líderes Omatikaya del antiguo clan de Neytiri. Por lo tanto, dejarían a Neteyam y Tsireya a cargo y como era una época de paz no había tantas tareas que atender. Cuando llegaron a la jungla, fueron recibidos por Mo'at, madre de Neytiri que, a pesar de todos los años de separación, se mantuvo viva y fuerte para el clan, sin embargo, se podían ver los signos de vejez. Por su parte Tarsem (quien ya se veía como un adulto) junto con su familia extendió sus brazos para recibir a su antiguo líder. La bienvenida se fue tornando emotiva cuando Mo'at y Neytiri se abrazaron tratando de compensar todo el tiempo de separación. Tarsem saludo con respeto a Tonowari y Ronal, pidiendo una explicación por la sorpresiva llegada, entonces Jake le contó acerca de la idea de unir los clanes, claro que Tarsem se sorprendió porque pensaba que podrían venir a pedir la mano de su hija mayor, quien era aprendiz de Mo'at, una vez que escucho de que iba el plan se tranquilizó. Aunque no se veía convencido de recibir gente Metkayina, pero con la intervención de Mo'at les dio el beneficio de la duda.

Por la noche en Awa'atlu Neteyam dejaba que las olas acariciaran sus pies mientras estaba sentado, recargado sobre sus brazos hacia atrás mientras miraba al cielo, sintió nostalgia saber que ese mismo cielo podría estarlo viendo desde la rama de un árbol (como sus padres en ese mismo instante estaban haciéndolo). De hecho, fantaseaba con estar sobre un árbol con el aroma de las hojas, sonidos de los animales nocturnos que inundaban la noche en la jungla, la textura rugosa de la madera, el musgo húmedo y el aire de las alturas, pero todo terminaba cuando la marea subía hasta sus rodillas y al irse le dejaba una sensación fría, esa sensación lo regresaba a la realidad. No odiaba vivir ahí, agradecía poder estar vivo y sentir el mar; a pesar de haber tenido los últimos días sofocantes por Lo'ak y Aonung (que la actitud de éste se había vuelto más hostigante para Neteyam, pues comenzaba a comportarse nuevamente como el adolescente que conoció hace años que lo molestaba para llamar su atención); trataba todas las tardes y noches buscar tranquilidad, la diferencia en aquella ocasión era que tampoco se sentía presionado por sus padres ni los que se volverían sus suegros para cumplir un rol. Podía respirar al fin.

"Los Sully somos uno", pensó e inmediatamente se agobió, la sensación de que algo le faltaba no dejaba de atormentarlo, sumándole que sentía que había roto la principal "regla" que tenían como familia; se dejó caer en la arena y extendió sus brazos para poder ver sus tatuajes, y pasó una de sus manos sobre el collar que aquel lejano día había intercambiado con Aonung. Creía que era la añoranza de su antiguo hogar, sobre todo porque sus padres regresaron allá y era muy probable que ellos también fueran, aunque sólo fuera por un tiempo. No obstante, no era ese el verdadero problema, tenía nuevamente que ser el Olo'eyktan; cuando abandonaron su antiguo clan al tiempo había abandonado tan pesada carga, si bien aún se sintió responsable de sus hermanos, ya no había otra cosa que llenar.

Luego de que despertó del coma que le causo la herida en su pecho, trató de enfocar al techo del marui de su vivienda, estaba acostado al lado de un tenue fuego, Neytiri y Jake estaban sentados abrazados en la cabecera, a sus pies estaba Lo'ak con sus hermanas y Spider dormidos, Kiri en su hombro con Spider en su pierna dormido y Tuk en la pierna de Lo'ak, cuando trato de hablar sólo consiguió toser, de inmediato Neytiri se levantó para acercársele dejando caer a Jake al suelo, quien se levantó tan rápido como vio a Neteyam toser en los brazos de Neytiri, ella lloraba de felicidad al ver que su hijo había abierto sus ojos.

- Gracias gran madre - suspiró cargando la cabeza y el torso de Neteyam como si fuese un bebé, sus hermanos también se levantaron felices, Tuk comenzó a llorar de felicidad, Lo'ak corrió por Ronal para que lo revisará.

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⏰ Última actualización: Apr 10, 2023 ⏰

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