It's γou: Two Heɾoes ||Todoɾoki Shoto

Bιᥱᥒvᥱᥒιdos ᥲ ᥣᥲ I-Isᥣᥲᥒd

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El próximo verano volveré a ver los fuegos artificiales con Shoto. Aunque... pensándolo mejor, también los podemos ver en año nuevo.

¡Aah, eso sería increíble!

Si recibimos el año nuevo juntos, espero que seamos como una... ¡Ah, si! ¡Si! ¡Si! ¡Si!

Nada me haría más feliz que...

— Mai.

La suave voz de mi madre me saco de la profundidad de mis pensamientos, despegue mi vista del azulado cielo que miraba a través del cristal de la pequeña ventana y le puse atención.

— Ya estamos por llegar —tomo asiento frente a mi— tu padre dice que en veintinueve minutos aterrizamos.

Asentí en silencio, tenerla así de cerca aun me parecía tan extraño, estar en un espacio cerrado, juntas con mi padre piloteando el Jet privado, era extremadamente extraño. Ni en mis más vagos sueños había creado esta escena. No tendria imaginación suficiente para hacerlo o enfrentarlo.

Solté un pequeño suspiro.

¿Por qué estoy aquí?

Quiero irme a casa y ver a Shoto. No tuve ni tiempo para decirle que saldría de viaje. Mis padres solo me sacaron de la cama y me subieron al Jet. No se ni siquiera a donde nos dirigimos.

Pero sea cual sea el lugar, yo no tengo permitido viajar. Aizawa-sensei, me matará.

Mire a mi madre, estaba leyendo un libro. Que hermosa y elegante se ve. Me pregunto si así también me veo, por curiosidad, baje mi mirada a la portada... ¿En serio madre? ¿En serio estas leyendo ese libro?

100 Consejos infalibles para ser una buena madre.

Listo. Me voy de aquí.

— Mamá.

— ¿Eh? —despegó su mirada del libro para verme— ¿Que pasa Mai? ¿Necesitas algo? ¿Agua? ¿Jugo? ¿Un poco de vino sin alcohol?

— Necesito información, ¿A donde vamos y por qué?

— Oh, eso... tú padre recibió una invitación para una fiesta de inauguración sobre un proyecto de un amigo suyo. No podía negarse.

— Oh, ya veo. ¿Donde están los paracaídas?

— En el baúl qué está alado de la puerta de emergencia, ¿Por qué?

— Me largo de aquí —me puse de pie dispuesta a saltar a quien sabe cuantos metros de altura.

A fin de cuantas no me importa, no estaba dispuesta a quedarme un minuto más. Una fiesta de inauguración significa negocios, negocios y más negocios.

¡Que aburrido!

No me interesa saber nada de eso, yo ya tengo el camino que quiero recorrer.

— ¡Mai, espera! ¡Habrá héroes! ¡Muchos héroes!

— ¿Que? —me detuve en seco, mi cuello tronó un poco por lo brusco qué había girado, pero eso no importaba ahora. Ella dijo... — ¿He-heroes?

— El amigo de tu padre, es un científico qué hace artículos de apoyo para los héroes.

— ¿Como es que nunca supe de eso?

— Aunque no lo creas, también me acabo de enterar de la existencia de ese amigo suyo. Por el tema de los héroes... ya sabes.