Todos los secretos (Segunda parte)

Capítulo 278

Narra Mateo

+ ¡Enhorabuena!

La recibo entre mis brazos nada más abandonar el escenario. La banda sigue allí arriba, José entre ellos.

+ Ha sido brutal.

Aseguro.

+ Estoy muy orgulloso de ti.

Prometo. No ha sido fácil sacar adelante este show, y como siempre, ha dado lo mejor de ella para que sea una burbuja única con los suyos.

Me mira mordiendo su labio inferior, emocionada.

+ ¿Te lo has pasado bien?

Yo sí he sido testigo de los intentos por reclamar la atención de su hermano que ha evitado sostenerle la mirada, pero ambos son profesionales y si no supiera lo que está pasando en detalles no habría caído en que están enfadados.

- Dentro de lo que cabe sí.

El resto de sus compañeros empieza a aparecer, por lo que nuestros arrumacos se ven obligados a postergarse.

Están pletóricos. Ha sido un show increíble. Nadie diría que poco antes de subirse allí ha habido algún problema.

R: Mateo, vamos a tomarnos unas tapas, ¿te vienes con nosotros?

Rubén me invita amablemente.

+ No, chicos. Gracias.

Declino la oferta. No creo que Malú esté con cuerpo para fiesta y mi único plan se limita a ella.

Y: Anda, guapo, que llevamos tiempo sin verte por aquí.

Su hermana apoya la invitación.

+ Prometo venir a veros más a menudo y en otra oportunidad iré encantado.

Y: Pero venga, una cañita bien fría y luego a casa.

Insiste.

Y: Yo también me iré pronto, puedo hacerte de guardián para que estos fiesteros no te líen a más.

Propone divertida sin abandonar su persistencia.

Ju: Anda, jefa, vente tú también y te marchas con el grupo de los aburridos.

Reparo en que mi chica no se ha perdido detalle del plan de su equipo y especialmente del interés de Yaiza por que me sume a ellos.

- ¿José va?

Ju: No sé, creo que se encontraba mal otra vez.

Le busca con la mirada, pero es el único que no está aquí.

- Id vosotros.

Rechaza el plan.

- Ya si eso voy luego con José.

Y: ¿Y tú, Mateo?

+ Que va, otra vez será.

Me quedo charlando un rato más para no ser tan evidente que espero a Malú que ya se ha ido a su camerino. Pocos minutos después y tras unos suaves golpecitos en la puerta que anuncian mi presencia me cuelo dentro. Está cambiada y con el pelo mojado tras una ducha rápida.

- Mateo, si quieres irte con ellos...

+ ¿Estas tonta?

La abrazo por detrás, dejando un beso en su cuello y luego apartándome ligeramente para poder masajear sus hombros. Un ronroneo de placer anuncia mi acierto.

- En serio, yo buscaré a José, necesito hablar con él.

+ Y yo voy a esperarte.

La informo de mis planes.

+ O acompañarte.

Son mis dos opciones. Según lo que a ella la haga sentir mejor.

- Gracias.

Se gira para besarme sin prisas ni pretensiones.

- Por cierto...