Némesis[✔️] ©️

17_Un nuevo hogar ✔️

Némesis

Cada milímetro de mi cuerpo arde. Se siente como si hubiera estado años acostada en la misma pose. Los ojos me pesan y una luz blanca impide que pueda abrir estos. Parpadeo un par de veces hasta que con algo de dificultad divisó el lugar donde me encuentro.

Mi vista recorre la habitación color blanca, unas rosas rojas decoran el lugar dándole un aire cálido. Intento moverme pero un dolor en mi abdomen me lo impide por ende levanto la sábana que me cubre y puedo notar al poner mis manos sobre mi piel unas vendas, las cuales están cubierta por agujas, al parecer pasando algún tipo de suero a mi sistema.

Dejo caer con frustración la cabeza sobre la almohada y a mi mente llegan los recuerdos de aquel día. Como mi propia madre me quiso asesinar, las palabras estúpidas que le dije a Chad y lo peor de todo es aquellas mentiras sobre Atenea. Todo este tiempo fui un objeto para ellas, algo de lo que se sin dudas iban a desechar cuando todo estuviera hecho. Descubrir que tu madre es una farsa y que todo lo ha hecho por su beneficio, me causa rabia ¿Por qué fui tan idiota? ¿Por qué no tuve una familia normal? De alguna forma debo de llegar al centro de todo ¿Por qué mi madre hizo todo esto? Sin duda Atenea tiene las respuestas a esas preguntas y me las debe. He pasado por muchas cosas si me pongo a analizarlas, pero eso sería abrir heridas que están cerradas a base de golpes. Me tocó hacerlo, me tocó vivir con eso y tragarme las lágrimas cuando en realidad estaba muriendo por dentro. Porque nadie además de Atenea me dijo que me quería, nadie me explico que mi madre dejaba que violaran a mi hermana frente a mis ojos, nunca nadie me dijo que estaba siendo preparada para destruir a una persona que no tenía nada que ver con todo lo que estaba pasando y mucho menos que acabaría enamorada de él.

Puedo decir que en mis veinticinco años nunca he sentido tanto miedo como ahora, por una parte está la verdad, el hecho de que mi madre está detrás de todo esto y no me sería nada difícil venderla con Chad, pero está mi hermana y lo peor de todo no es ir a la cárcel, es esa sensación rara en mi pecho de contarle la verdad a Chad y que me odie, porque lo hará y entonces ese sería mi fin. No puedo perder a la persona por la que mi corazón quiso latir por primera vez, la única que en años me ha logrado sacar una sonrisa y eso, eso no lo pienso arruinar.

En un principio lo odiaba, odiaba el hecho de saber que su familia tenía algo que ver con la muerte de mis padres, pero ahora todo está muy claro y puede que me equivoque pero se con certeza que las manos de mi madre están detrás de todo esto y antes de dar un paso en falso tengo que descubrir la verdad.

La puerta de la habitación se abre dejando ver a Atena con el doctor. La primera corre hacia mi con los ojos vidriosos.

__Hermana __susurra e intenta tomar mi mano pero la aparto. Por sus mejillas rueda una lágrima y me volteo al doctor.

__Eres muy fuerte señorita, has evolucionado bastante rápido. Se notan las ganas de vivir __dice mientras chequea mis pupilas.

__Tengo asuntos pendientes, no me podía marchar sin más__. ¿Estuve mucho tiempo inconsciente? __pregunto.

__Diez días, pero la operación fue un éxito gracias a su novio __¿novio? Confundida observó a Atenea.

__Chad donó su sangre.

__¿él hizo eso?

__Si, casi la perdemos, pero aquí está sana y salva. Dentro de unas horas volveré para realizarle unos análisis.

__Muchas gracias doctor __responde Atenea y el doctor desaparece por la puerta.

__Nem... Yo... Yo lo siento.

__Es muy tarde, ya el daño está hecho.

__No podía decirte, no sabes todo lo que he aguantado estos años Nem, el daño, todas y cada una de sus mentiras...