Capítulo 3

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Pasó un mes desde la última vez que hablé con Andrea, ése mes paso volando, ya casi terminábamos el primer semestre, desde entonces, me dedicaba a observarla de lejos, admirando algo que no creo ser capaz de alcanzar. Jamás me había puesto así con nadie más, ella, tenía algo que me hacía sentir atraído, no estaba seguro de que era, pero ella tenía algo.  

Me encaminé a la parada de autobús . Y la esperé. Pero por alguna razón, no llegó.

Al subir al autobús, volteé mi vista para ver si venía, pero no había rastro de ella. Me enrollé las mangas en gesto de angustia y busqué asiento. 

Llegué a la escuela y todo estaba  como de costumbre, las materias pasaron volando. Después de artes plásticas tuvimos el descanso 1, y mientras estaba comiendo con Mauricio, escuché que unas chicas de primero estaban hablando.

-¿y Porqué  tengo que llevarle yo la tarea a esa imbécil?- dijo una chica con cara de repugnancia.

-porque la tutora te lo pidió a ti, ni creas que yo iré a la casa de esa rata de laboratorio.

¿De quién estarían hablando? ¿sería de Andrea? Ella había faltado ése día, y si estaban hablando de ella, ¿porqué se dirigían a su persona de una manera tan soez?  

-¿De quién hablan?

-de la rata de laboratorio- fruncí el ceño con cara confusa- Andrea de primero B - aclaró

-Es que la tutora me encargó a mi pasarle las tareas porque hoy no fue, pero yo no quiero pasarle la tarea ni ir a su casa, además, ni siquiera tengo tiempo- dijo entregándole unas hojas a la otra chica.

-No creo que esa sea la forma correcta de referirse a ella- porque en realidad, no lo era, no podían referirse de tal forma hacia una persona como Andrea .  

-¿A quién? ¿ a la rata de laboratorio?- asentí- acaso...-dijo haciendo un gesto burlón- ¿te importa?- No respondí- eso pensé- me dijo con esa voz de niña malcriada que me irritaba.

-Es que, si ninguna de ustedes quiere entregarle sus tareas- dije un poco titubeante- yo paso por su casa de camino a la mía, y, si quieren...

- ¡si! por favor, llévasela- me dijo prácticamente aventando me las libretas- te paso las demás a la salida.

Y se fue corriendo al mismo tiempo que la campana sonó.

El resto del día fue normal, las mismas maestras irritantes de siempre, y los mismos alumnos sobreviviendo al curso. A la salida esa chica me entregó las demás libretas y la dirección de Andrea.

-¿sabes por dónde es?-preguntó mirándome desconfiada.  

-Si- dicho esto, me fui corriendo.

Cuando estaba en el autobús, empecé a pensar, ¿porqué le llevaba la tarea? ¡Iba a creer que era un acosador aprovechado!  ¿Porqué  actuaba tan rápido sin pensar? ya no podía dar marcha atrás, ya me había comprometido.

Me bajé en el lugar donde solía bajarse Andrea, saqué el papel con la dirección y me encaminé.

Con cada paso que daba, el corazón me latía con más fuerza, y yo subía cada veinte segundos mis mangas para aminorar los nervios. 

Finalmente, llegué a la calle donde debía estar su casa; empezé a buscar, número 350. Busqué una casa que tenga ese número, bajé el papel de mi vista y una casa blanca de dos pisos estaba en frente de mi;  tragué saliva, y toqué el timbre. Me abrió un señor ponchado de pelo castaño.

-¿Qué se te ofrece chico?- me preguntó en un tono amable. Era el padre de Andrea.

-E... e... ¿ésta es la casa de Andrea?- le respondí con el corazón en la garganta y titubeante.

-¿Amigo de Andrea? - me preguntó

-ehhh... si... Vengo a pasarle las tareas- dije con voz temblorosa.

-Pasa- me dijo señalándome la entrada, en ademán de que pase.

Entré, y me quedé parado en la entrada. No estaba nada mal su casa, tenían unas pinturas que parecían ser caras, y muchas vasijas de porcelana; además, unas fotos de Andrea cuando era pequeña.

-Siéntate- me dijo el papá de Andrea.

Me senté y cinco segundos después, bajó de las escaleras una mujer con ojos color miel y cabello rubio.

-¿quién es éste joven tan guapo?- preguntó mientras iba bajando.  Me sonrojé un poco. Era la madre de Andrea.- ¿quieres algo? Te traeré té.

- vino a pasarle las tareas a Andy-dijo el padre de Andrea. ¿Andy?

-¿Y cómo te llamas jovencito?- preguntó dirigiéndose a la cocina

- Me llamo Max. ¿se  encuentra Andrea?

- Oh, querido, Andrea se fue a su concierto.

-¿Concierto?

-Es que Andy toca piano en la orquesta y coro internacional de "voices of glory"

-¿Y como a que horas llega?

Y justo después de decir esto, Andrea entró por la puerta con una carpeta en la mano derecha. Me vio, abrió los ojos como platos y se sonrojo; se quedó mirándome con la boca abierta durante cinco segundos que parecieron una eternidad.

-¡Aquí está!- finalmente exclamó su mamá mientras la estrechaba entre sus brazos-¿Cómo te fue cariño?

-Eh... bien, mamá- le contestó Andrea a su madre con voz baja, casi un susurro.

-Tu compañero vino a pasarte las tareas.

-¿ Ah si?- preguntó Andrea a su mamá con cara de confusión.

-si, emm, pues aquí están las anotaciones de geografía, las tareas de biología y tu examen de Francés es el Martes- dije entregándole las libretas.

-ehhh, gracias- me dijo mirando las libretas y sonrojándose más.

-bueno, pues , muchas gracias y con permiso- dije dirigiéndome a la salida .

-Cuando quieras cariño, vuelve pronto- me dijo su mamá mientras hacía un gesto con la mano.

Y me fui.

Seguramente quedé como un tonto ese día, ella sabía que no estaba en su salón, ¿qué habrá pensado de mi? ¿que estaba loco?  ¿que era un acosador? Hubiera dado lo que fuera por saber que pensaba de mi. Entonces, fue cuando me di cuenta: a mi nunca me importó lo que la gente pensara de mi o de mis acciones, pero, yo quería causar mi mejor impresión para ella, quería aspirar a la perfección para poder gustarle. 

Cuando llegué a mi casa, mi mamá salió y corrió a abrazarme.

-¿dónde estabas? Me tenías muy preocupada, estaba a punto de llamar a la policía- me dijo sollozando.

Yo la abrazé también para tranquilizarla y ella hundió su nariz en mi cabello. 

-ya pasó, ¿quieres comer algo? Debes estar muy hambriento.

-perdón, es que le llevé la tarea a una amiga que faltó hoy- le dije al notar su tranquilidad. Se me había olvidado avisarle que le iba a llevar la tarea a Andrea. 

- lo que importa es que estás aqui sano y salvo.

Cenamos, y yo me fui a dormir, pensando en Andrea. No me acordaba haber sentido algo parecido con alguien. No sabía que debía hacer, ni que clase de sentimiento era, 

Pero fuera lo que fuera, me estaba consumiendo poco a poco.

******************
Hola! Como están? Les está gustando?  Qué opinan de Max? Les cae bien?  En el siguiente capítulo voy a tratar de que narre Andrea para que la conozcan un poco mejor. 
Voy a estar subiendo capitulo los Lunes, Miercoles, Viernes y los fines de semana.

Yo aquí me despido,

~krista♥



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