Parte única

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Como cuchillo
En la mantequilla
Entraste a mi vida
Cuando me moría

Observó por unos segundos al semidios sin poder creer lo que había escuchado.

¿De verdad ese ser tan perfecto le estaba pidiendo casarse?

Como la luna
Por la rendija
Así te metiste
Entre mis pupilas

Aun recordaba la primera vez que lo vio.

Había conocido a mucha gente en esa estación del tren, tal vez su forma de hablar el ingles no era la más fluida, pero había esperado poder hacer algunos nuevos amigo en ese viaje, después de todo fue por eso que había aceptado.

El azabache buscaba vivir nuevas experiencias y salir de su zona de confort, sobre todo después de como habían terminado las cosas en su antiguo pueblo.

Si bien una segunda boda fallida ya era doloroso, el hecho de que Rubius, quien de por si ya era su ex, se hubiera casado en ese momento con su ahora ex prometido fue un golpe muy duro.

Parecía que nunca iba a poder encontrar un amor real, alguien sincero que lo quisiera sin pedir nada a cambio.

O al menos eso creía, hasta que vio esos ojos esmeralda que parecían brillar más que la luna misma.

Podrías llamarlo un crush instantáneo, un flechazo, amor a primera vista, no lo sabía, pero de lo que si estaba seguro era que quería conocer más al híbrido. Tal vez fue por eso que, al saber que no iba a tener la oportunidad de hablar de nuevo con él, decidió hacer algo que nunca hacia.

Romper las reglas.

— ¡I PUSH DE BOTON!

Y así te fui queriendo a diario
Sin una ley, sin un horario
Y así me fuiste despertando
De cada sueño, donde estabas, tú

Había pensado dejar las cosas así, tal vez había tenido un pequeñísimo crush con el híbrido (quien luego descubrió se llamaba Foolish) pero eso no significaba que fuera a hacer algo para llevar más allá las cosas.

Si, tal vez pasaba muy seguido por el monumento que el menor buscaba construir, pero era porque sabía el trabajo que costaba recrear semejante obra de arte, no porque quisiera encontrarse con el semidios.

Si, tal vez le daba muchas cosas encantadas como picos o a veces armaduras, pero era porque sabía lo difícil que era juntar los materiales para tus construcciones, no porque quisiera una excusa para hablar con él.

Si, tal vez se desvelaba para coincidir con el menor, pero era porque así podía practicar su ingles, no porque quisiera pasar tiempo con él.

¿Verdad?

Vegetta sabía, o al menos creía, que no importaba si hacia todo eso, porque Foolish no se daría cuenta de sus sentimientos, lo vería solo como él siendo amable, después de todo ellos eran amigos.

Solo amigos.

Y nadie lo buscaba
Y nadie lo planeó así
En el destino estaba
Que fueras para mí

Pero entonces llegó Leonarda y las cosas cambiaron.

Y vaya que cambiaron. Aun recordaba lo feliz que se puso y las palabras exactas del semidios ese día cuando fueron seleccionados para cuidar juntos de la pequeña Leo.

Amor del bueno || FooligettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora