Hablar ya no sirve, ya nada me sirve, me ahogo en todo, el vaso se rebalsó y aún así, sigue llenándose como si no tuviera un fin.
No tengo recuerdos, no sé nada de mi, no tengo nada de mi infancia, de esos años que dicen, deberían ser los más apreciados, para mi fueron los peores, aunque no me acuerdo de nada.
Dicen que la mente borra eso para que no te siga lastimando, pero yo quiero saber que pasó, quiero saber porque soy así ahora, pasaron muchas cosas lo sé, desde abuso hasta abandonos de la familia, y sé que dolería saber toda la historia, pero necesito saber de mi, necesito saber que me pasó para ser así, el porqué soy tan reservado, el porqué existo, el porqué mis traumas. Sé porque tengo algunos, pero no sé todos, y es desesperante no poder tener la certeza de si estoy exagerando, de si solo quiero llamar la atención, o si realmente me pasó algo en esos años que no logro ver.
Sé que sufrí, sé que todo esto empezó desde los 6, desde ese día que me dejó el dolor y miedo más grande del mundo, que me dejó con secuelas aún, insuperables para mi.
Es gracioso, no me conozco en lo absoluto, es como ser un desconocido para mi mismo, alguien random que aparece de la nada y quiere hablar.
A Leo lo apagaron, lo hicieron esconderse, él si es abierto, divertido más que nada extrovertido, pero lo mataron, lo intimidaron, fue tan lastimado que ahora no puede ni quiere ser él, ahora se reserva todo, observa y analiza, escucha y se queda callado, ese es Leo ahora, a veces extraño al de antes, que reía mucho, disfrutaba cantar, hasta bailar le gustaba, él fue feliz y se lo arrebataron con mucha maldad.
