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Extra 1 - Mundo Interior

Inside World

Cuando fui secuestrado por primera vez y apenas volví con vida, dijo mi padre.

 - Debo enseñarte cómo sobrevivir por tu cuenta. 

Murmurando para si mismo, me miró. Un solo ojos gris plateado, en contraste con el cubierto con un parche, me miraba con frialdad. 

Sin siquiera gritar, la mujer retrocedió. El coraje para saltar y matar al jefe de la mafia con su cuerpo desnudo era imaginario, pero el sentido de la realidad era cero. Ni siquiera me arrepentiré. Caesar continuó su trabajo con un rostro inexpresivo y una pistola resplandeciente. A pesar de su movimiento mecánico hacia adentro y hacia afuera, la mujer solo temblaba impotente.

Después de eyacular, empapado en la sangre de la mujer, salió como si nada. Caesar en bata, todavía sosteniendo la pistola en su mano, salió de la habitación y los pandilleros que esperaban se detuvieron. 

***

"Para Dmitry". 

Cuando Caesar abrió la boca, los hombres se pusieron alerta de inmediato. A los miembros de la pandilla que esperaban la siguiente palabra con la cara rígida, les habló con una voz que no era nada diferente a la habitual. 

"Dile que estaré allí pronto". 

Detrás de él, mientras pasaba sin dudarlo, podía escucha los fuertes ruidos de los pandilleros que entraban corriendo a la habitación y limpiaban. De repente, el cabelleo que le caía sobre la frente. Caesar se molestó y movió la pistola con la mano. La sangre seca en su brillante cabello rubio platino hizo que su cabello se volviera pesado y volviera a Caer sobre su frente. Lo dejo solo esta vez. 

Necesito tomar una ducha. 

Pensando con indiferencia, Caesar siguió caminando.

*** 

La voz alta de los que chicos que no habían pasado su juventud sonaron suavemente. Un hombre sentado solo en la parte trasera de un gran iglesia escuchaba en silencio un himno en latín. Las escasas voces de los cantantes se desvanecían por los espacios vacíos de la magnífica iglesia, lejos de llegar al cielo, parecían incapaces de atravesar los muros de la iglesia como es debido. 

"Señor Lomonosov". 

Lev se sentó en el asiento trasero y lo llamó. Inclinó la cabeza y le susurró a Mikhail, que era el séquito de mayor confianza, sin siquiera parpadear.

"Se acabo el tiempo, tienes que irte ... ... ." 

Soltó sus palabras con cuidado, pero Mikhail no respondió. Cuando dudó y trató de hablar de nuevo, abrió la boca. 

"Espero que tu voz tenga más fuerza la próxima vez que vengas". 

Lev, que había parpadeado sin saber lo que significa, pronto se dio cuenta: "Oh". Tardíamente, trató de refutar con Mikhail, pero ya estaba saliendo de la capilla detrás del coro que estaba ensayando el coral. Lev se sintió avergonzado y lo siguió apresuradamente. 

Cuando salí del edificio viejo y húmedo, la luz del sol atravesó mis ojos por un momento. Lev, que se protegió los ojos con las manos en lugar de usar gafas de sol, volvió la cabeza hacia el auto que esperaba y luego se detuvo. 

Alrededor de los escalones de piedra maciza, no solo los miembros de Lomonosov, sino también hombres de otras organizaciones estaban alineados. Una tensión inquietante se superpuso en la atmósfera única de la iglesia reverente y solemne. Lev dejó de seguir a Mikhail, que había dejado de caminar, y vio al hombre alto subir las escaleras más allá de él.