05. Dolor.
Akaza.Como podría describir lo que sentía, habían muchas palabras para definir su angustia. Dolor una simple palabra que podría explicar todo lo que sentía en esos momentos.
Un peli rosa se encontraba en su departamento viendo la televisión con la compañía de su gato. Pero su atención no estaba en ella, estaba pensativo.
Las lágrimas se hicieron presentes en su rostro, dolía, los recuerdos dolían demasiado. Odiaba sus días de descanso, por que no hacía nada más que atormentarlo por todo esos recuerdos. En esa fría habitación, en esas cuatro paredes que ahora significan paz y tranquilidad. El se deprimia.
¿Cuándo las cosas empezaron a ir mal?
No sabría responder esa pregunta. Akaza se preguntaba una y otra vez, ¿Que había echo mal? ¿Por qué las cosas con Kokushibo habían salido mal?, la relación que tuvo con él era algo dolorosa.
Akaza: ¿Por qué me sigue doliendo tanto? -preguntó mientras sollozaba.
"ME GUSTAS HAKUJI"
"Quiero ser algo más que amigos"
"¿Quieres ser mi novio?"
"Eres maravilloso"
"Te amo Hakuji"
El peli rosa lloraba en silencio, llevaba toda la tarde haciéndolo. Tenía miedo, que pasaría si lo encontraba, que pasaría si descubriera que había cambiado hasta su apariencia con tal de que no lo encontrará. Sabía que algún día lo haría, y eso aterraba al menor.
Akaza desconfiaba de cualquier hombre o mujer que se le acercaba con una intención de querer tener algo con él. Pero no era culpa suya.
No era culpa del peli rosa que la persona que más amaba lo dañara de esa forma.
Sabía que todo iba a ir mal cuando le perdonó la primera vez que abusó de él, desde que dejó que lo golpeara, y lo compensará con un ramo de flores y palabras lindas. Desde ahí, todo salió mal.
Recordaba ese día como si hubiera sucedido ayer, la manera en que le suplicaba que se detuviera por el dolor que sentía, lloraba, gritaba pero el mayor jamás se detuvo.
Flash back.
Sus besos dolían, sus caricias quemaban, sus palabras eran hipócritas.
El lo sabía, él sabía que todo lo que venía de él dolía, cada acción era aún más desgarradora.
Sus golpes dolían, su desprecio lo mataba, pero lo amaba, tanto que aguantó cada una de esas cosas con tal de seguir a su lado.
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Siempre serás tu.
De TodoSabían que no iban a estar juntos así de fácil, iban a ver obstáculos, pero al final siempre se buscaron el uno al otro. Soy nueva escribiendo, espero que esta historia sea de su agrado.