Heartless (Floyd x Riddle)

Prólogo

Los límites del reino se desdibujaban mientras el pequeño Rosehearts jugaba persiguiendo una mariposa de colores vivos, era cierto que estaba rompiendo las reglas impuestas por su madre, sin embargo, en su mente infantil solo se hallaba la idea de alejarse un poco tras un regaño por no "dar todo su potencial" durante las clases de su mamá.

Sabia que ella tenia razón, desde su nacimiento había sido preparado para asumir la corona del reino de Heartslabyul... Una corona qué en el fondo de su corazón no deseaba, pero que sabia que no podia negarse, después de todo debía cumplir con las expectativas que su familia tenia en él, que el pueblo tenia sobre él.

Su mente se nubló tanto por aquellos agobiantes pensamientos que término cayendo al piso, perdiendo a la mariposa que tanto quería ver

—¿Que hace un pez dorado tan lejos de su estanque?

Aquella voz ligeramente burlona le hizo levantarse de manera rápida, su madre le había dicho que no podía permitir que nadie le viera de manera "poco digna", asi que sacudió su traje mientras se giraba en varias direcciones buscando a quien le pertenecía aquella voz.

—Ordeno que salgas de tu escondite...

Dijo con voz autoritaria, una pequeña risa le hizo mirar rápidamente hacia las orillas del mar, sus ojos vieron por primera vez a un triton, fue inevitable notar lo hermoso de las escamas que parecían relucir con los ligeros rayos del sol, aquel ser le miraba con una sonrisa juguetona.

Era un habitante de Pomenelle.

Su madre le había advertido, sobre que no quería que estableciera conexiones profundas con nadie de aquel reino, despues de todo, ella los consideraba personas "vulgares y egocentricas", además de que al ser un reino mitad marino, mitad terrestre, era consideradas personas poco fiables y no al nivel de un reino "puro" como lo era Heartslabyul.

Pero aun asi, un pinchazo de curiosidad le hizo acercarse.

—¿Acaso el pez dorado quiere venir a nadar conmigo?

Musito el chico con una afilada sonrisa, haciendo que fruncida el ceño ligeramente molesto por el apodo que le había dado, él no era un pez.

—Riddle Rosehearts, ese es mi nombre.

—Pues a mi me gusta mas llamarte pez dorado~

Su rostro se torno de un color carmesi  ante aquella falta de respeto cometida por el de cabello aqua, sin embargo su enojo se vio rebajado cuando al acercarse para reclamar, se percató en el peculiar color de ojos de aquel habitante del mar, nunca había visto a alguien que tuviera un color diferente en cada ojo.

—Deberias tener mas respeto hablando con un futuro rey.

Dijo regresando a la tienda, mirándole con severidad, sin embargo, cuando otros niños retrocedían ante él, el tritón simplemente estallo en carcajadas.

—Bueno, entonces si aun no tienes una corona, sigues siendo un pecesito

Aquello hizo que el enojo brotara nuevamente en su interior, aventando un poco de fina arena al rostro del contrario, quien solamente volvio a reír, haciendo que su paciencia se agotará, llevandolo a dar media vuelta para irse de ahí.

—Por cierto, me llamo Floyd ~

—No me importa.

Grito en respuesta, apresurandose a caminar de regreso a su palacio.

¿Por que se hallaba aventando pequeñas piedras en el mar? ¿Por que había regresado a aquel lugar? Riddle no sabia pero en su mente claramente se dibujaba aquella sonrisa afilada y ojos con heterocromia.