Cervusdei [✓] [SagaJordfrin #1]

Capítulo 49

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“Luna se levantó. Estaba en el mismo lugar donde había caído. Certytus las esperaba. Volvió echar en vuelvo y ella continúo corriendo para intentar alcanzarla. Corrió y corrió hasta que llegó al océano.

El espíritu siguió volando y la marea fue bajando para dejar que ella continuara. Llegaron a unas rocas donde había una pequeña elevación de piedra, como una puerta, por la cual, Luna se adentró y terminó flotando en una inmensa oscuridad.

—Luna.

—Luna.

—Luna.

—Luna...

Escuchaba miles de voces diferentes. Masculinas y femeninas llamándola por todo lados. Fue entonces cuando antes sus ojos aparecieron esos que la llamaban y que nunca es su vida pensó ver...”

[...]

Los pasos de Chris resonaban mientras él bajaba las escaleras. Sus ojos no se apartaban del cuerpo de su sobrino. Estaba intentando hacerle creer a su vista que no era una mentira lo veían sus ojos. A mismo tiempo, intentaba maquinar algún plan para salir de esa situación.

Alison aún de rodillas en el suelo, estaba paralizada. No dejaba de llorar ni por un segundo. Soltaba grito tras grito. Su hermano, su confidente, su refugio, su sangre, ya no estaba. Se sentía vacía por dentro. Mirando aún el cuerpo de Alexis, intentó acercarse, pero su tío se lo impidió.

—No lo toques Alison —dijo con un tono apagado y triste.

—¿Por qué? —cuestionó con el rostro rojo y la voz rota.

—Tengo una idea para salir de esto, pero no lo puedes tocar.

—... Vale... —asintió sin dejar de mirar a su hermano.

Los cuerpos de Owen y Alexis, aún calientes no dejaban de escurrir sangre, manchando el piso y las escaleras. Alison nunca pensó matar al chico que quería y mucho menos que sería él quien le quitaría la vida a su hermano. Sin embargo para nada sentía culpa de a ver matado al que se supone que decía amarla.

—Harry, escúchame bien —Chris se paró frente a él—. Toma a Luna en brazos y sal de aquí... Llama a la policía cuando estés en un lugar bien lejos, si preguntan, diles que recibiste una nota de rescate sin firma y que tú junto a Alexis vinieron aquí, pero que él no logró salir y que la camioneta se rompió cuando ibas a irte —Harry se quedó callado mirando a su padre. Notó que estaba serio, sin embargo, en sus ojos de notaba su angustia y asintió sin decir palabra.

—¿Qué haremos Chris? —preguntó Sofía colocándose de pie, limpiando las lágrimas de su rostro angustiado y triste.

—Tú, Alison y yo nunca estuvimos aquí —con esas palabras dio a entender que debían limpiar cada rastro suyo del lugar—. Las grabaciones las eliminaremos y romperemos las cámaras, luego nos iremos caminando a la cabaña del acantilado, estamos cerca y después iremos a nuestra casa para esperar a la policía.

El plan era claro, rápido. Podría funcionar, solamente tenían un problema: el tiempo. Debían ser más que rápido y la verdad, no estaban en las condiciones necesarias para hacerlo, sin embargo, no les quedó otra opción.

Harry con algo de dificulta cargó a Luna en brazos y fue directo a la salida. Chris, Sofía y Alison vieron cómo se marchó para después ponerse manos a la obra.

No fue fácil. No estaban en las mejores condiciones mentales, pero sabían que no debían fallar. Revisaron cada detalle con lupa; destruyeron las cámaras y las grabaciones; cortaron los cables de la camioneta, además de quitarle algunas piezas; hicieron parecer que fue Alexis quien mató a Owen y finalmente, eliminaron toda información sobre la secta en ese lugar. Después de volver a revisar todo, se fueron rumbo a su cabaña. Mientras iban caminando, iban también borrando cualquier rastro de ellos en la nieve. Toda precaución era poca.