Un hombre común se despierto en un mundo sin rumbo fijo y dirigiéndose a la destrucción, aquí sin alguna esperanza se pierde en sus memorias para entrar en un trance que lo hace casi alucinar, no quería soñar puesto que en el centro de sus pesadillas estaba su mayor temor, de lo cual el huía desde muy pequeño: Sus errores..
Se adentró cada vez más en el cavilar de su entendimiento, lo empieza a agobiar el pensamiento del ¿Por qué he nacido? Cada noche al meditar él se hacia esta pregunta y se extiende tocando de forma insistente a la puerta de su alma; Esta molestándolo constantemente y ahora se torna en una posibilidad su duda, y rindiéndose se dejó llevar por su mi alma y ve un mundo que lo oprime a raíz de esta pregunta.
Como en el fluir del todo en la vida las preocupaciones influyen en diversos resultados ya sean positivos o negativos, mas esperando lo peor el recibía una gran recompensa pues se abría ante él una puerta inteligible la cual le daba una cordial bienvenida a un mundo irrealista pero sincero, algo realizable pues no era del todo imposible. Apareció en un lugar en el cual cada trazo y cada color eran perfectos en su perspectiva. Sabía un camino peligroso y de gran travesía entre la experiencia y la especulación. Comenzó a andar y andar adentrando cada vez más en su subconsciente, era extraño porque a pesar de que su imaginación volaba rápidamente la raza humana no aparecía; Aunque a esto no le dio mucha importancia avanzo y el ambiente cambio llenándose de las cosas más apreciadas. Extendió su brazo derecho y sintió caer en un agujero más luego entro en él una sensación no de caída sino de vuelo, y este no era un hoyo mas era un túnel en el que me encontraba ¿Qué es esto? Se preguntó, mas no hubo pronta respuesta para él. Notaba que su vida se reflejaba en un círculo de sentimientos, cada vez que daba un paso se daba cuenta que solo sus errores estaban presentes, por curiosidad se acerque; Saltar de un momento a otro en sus recuerdos, se veía fácil. Fue raro sin embargo hermoso, tenía la sensación de estar viendo la vida de otro pues no veía tanta preocupación de la que pensaba.
Nunca imagino, qué está forma de ver la vida era tan conformista e ingrata pues era bastante limitada y necia. Habían cientos, existían miles de equivocaciones; Esto fue un golpe para él, pues su perspectiva siempre fue alcanzar lo imposible: La perfección. Y ahora este hombre se va a despertar en un mundo sin rumbo pero ahora con esperanza, y valorado cada cosa cada instante de su vida pues al final comprendió la belleza y perfección que existía aun en los errores porque en su vida los evitaba y los repelía como una alergia sin tomar en cuenta la significativa experiencia y enseñanza que se obtiene al fallar. Su actitud mejoro día a día y así fue hasta el día de su muerte, en donde en estado de agonía recostado en su cama rodeado de sus seres queridos, cuando vio pasar su vida frente a sus ojos no sintió remordimientos por sus acciones pues en el fondo de su corazón sabía que aprecio y vivió cada segundo de su vida cumpliendo lo que una vez en sus sueños comprendió: Los errores no son barreras ni barricadas a sus sueños, son impulsos que la vida misma proporciona para mantenernos alerta y seguir progresando. Y así tras haber vivido una vida con felicidad prudencial falleció