𝙳𝚒𝚛𝚝𝚢 𝙱𝚘𝚢 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘

⌜Capítulo 10⌟

•͟➳ Minho

Después de quince minutos, hemos llegado a un lujoso restaurante y evité con todas mis fuerzas maldecir al desgraciado extranjero que seguramente, eligió este lugar para enviarme directo y sin escalas a la quiebra que tanto me ha seguido en silencio desde que me independicé.

"No caigas en su perverso juego, Lee Minho", me dije a mi mismo mientras me bajaba del auto para después, proceder a caminar junto al extranjero hacia el interior del restaurante. Tan pronto entramos, se acercó una chica y nos llevó a una de las mesas que se encuentran en la parte posterior del lugar, para ser más exactos, a la terraza y no puedo negar que la vista es bastante maravillosa.

Tomé asiento y admiré en silencio los alrededores puesto que no había tenido oportunidad de visitar un restaurante tan lujoso y costoso como este debido a que tengo que pagar primero algunas deudas pendientes que tengo. Dirigí la mirada hacia el frente y me quedé inmóvil al encontrarme con la brillante y penetrante mirada de Christopher Bang; sinceramente, me parece imposible negar el obvio hecho de que es un hombre bastante apuesto, pero cuando abre la boca, todo se va a la mierda.

—¿Qué me ves? — le pregunté con evidente molestia.

Bang enarcó la ceja antes de responder—: Estaba pensando que eres bastante lindo, pero todo se va a la mierda cuando abres la boca.

"¿Qué mierda? Pareciera que puede escuchar mis pensamientos a la perfección", me fue imposible pensar mientras intentaba mostrar una expresión en blanco.

—No digas tonterías— le pedí.

—Hola, ¿qué desean ordenar? — nos preguntó un chico tan pronto se posó frente a nosotros.

Dirigí la mirada hacia Bang y este entendió a la perfección por lo que no dudó en hacerse cargo de elegir lo que vamos a comer.

—¿No sueles visitar esta clase de restaurantes? — me preguntó tan pronto se fue el chico.

—Pensé que era demasiado obvio.

—Yo creí que conocías todos los restaurantes lujosos del país— admitió. Y no me fue posible molestarme porque tengo la seguridad de que no está siendo burlón en estos momentos.

—La verdad es que no suelo visitar estos lugares a causa de que no tengo el suficiente dinero para hacerlo— confesé. —¿Qué me dices de ti? Acaso, ¿eres parte de una familia millonaria?

El pelinegro simplemente se encogió de hombros a modo de respuesta por lo que no dudé en preguntarle—: ¿No me dirás nada sobre ti?

—¿Qué es esto? ¿Una cita? — preguntó con tono burlón y le mostré ambos dedos medios a modo de respuesta y esto generó que el pelinegro soltara una estruendosa carcajada que me hizo rodar los ojos. —Está bien, no te esponjes— me pidió —¿Qué quieres saber sobre mí?

—Me gustaría saber quién es tu contacto dentro de la empresa.

—No entiendo tu pregunta...

—Sabes perfectamente a lo que me refiero— le interrumpí.

—Aquí esta su orden, caballeros— dijo el chico tan pronto hizo acto de presencia con nuestros respectivos platillos. —No duden en llamarme si desean algo más. ¡Provecho! — exclamó antes de irse.

—He pedido este platillo para ti porque tengo la certeza de que te encantará— dijo Bang mientras me hacía entrega del antes mencionado —Espero que lo disfrutes.

—Gracias— dije sin pensarlo.

—No cabe duda de que eres bastante lindo cuando eres educado.

—Será mejor que dejes de decir estupideces o de lo contrario, el contenido de este platillo quedará embarrado por todo tu rostro— le advertí con tono serio.

—Eres bastante agresivo— murmuró antes de darle un sorbo a su vino.

Decidí ignorar lo que ha murmurado y me concentré en el platillo que tengo frente a mí. Y sin perder más el tiempo, probé un poco y me enamoré por completo del sabor que me maravilló por lo que cerré mis ojos y disfruté al máximo la textura y sabor de la carne. Al abrir los ojos, me encontré con la oscura y penetrante mirada de Bang y no puedo negar que se ve más jodidamente atractivo de lo normal.

—¿Qué pasa? — le pregunté mientras me limpiaba la boca.

—Te lo diría, pero no me gustaría que tu comida quedará embarrada por todo mi rostro— respondió.

Su respuesta me ha dejado muy claro que estaba pensando en que "soy bastante lindo". Eso no es nada más que una mierda sin sentido.

—¿No piensas comer?

—¡A la orden, capitán! — exclamó con tono burlón antes de introducir un pedazo de carne a su boca.

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Al final, Bang pagó la cuenta y no tuve otra opción más que aceptar a regañadientes. No puedo negar que me siento agradecido por ello ya que, casi perdía toda una jodida quincena en esa cuenta. He trabajado demasiado y me he esforzado mucho para llegar hasta donde me encuentro y evidentemente, no voy a caer de nuevo puesto que tengo la esperanza y certeza de que algún día, obtendré el puesto que merezco y entonces, me daré algunos lujos que tanto me he perdido por falta de dinero.

—¿Te gustó la comida? — me preguntó Bang mientras conducía hacia la empresa.

—Por supuesto— respondí —Aunque, no me gustó la compañía...

Bang bufó antes de decir—: Todavía me debes una comida.

—¿Por qué?

—Porque yo he pagado esta vez.

—No te obligué...

—Estaré esperando mi comida— me interrumpió y no pude decir nada puesto que se bajó del auto ya que hemos llegado a la empresa, así que, lo imité y después de cerrar la puerta, caminé junto al extranjero hacia el interior del enorme edificio.

—Puedes volver primero— le dije mientras señalaba el elevador.

—¿No te gustaría ser visto conmigo? — me preguntó.

—Es correcto— respondí —Ya vete.