⚜️5-Un Nuevo Yo: Parte 1

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Aburrida...

Así me sentía mientras me miraba al espejo acomodando el vestido negro y ajustado con escote recto.

Odio cuando Rebekah me obliga a hacer estas cosas.

-Creo que le falta una parte a esto -escuche quejarse a la nombrada y suspire antes de voltearme para salir.

-Pues no hermanita -replique sarcástica y cuando esta volteo a verme note que traíamos el mismo vestido- no seremos gemelas otra vez -deje claro cruzándome de brazos recordando esa oscura época donde Rebekah amaba vestirnos idénticas

-Tranquila no quiero que parezcamos prostitutas idénticas, por que así parecen vestirse las chicas actuales -se quejo dando una vuelta mientras se veía el trasero en el espejo y reí divertida.

-Aun recuerdo cuando nos veían feo por los pantalones, recuerdas Nick... -bromee volteando hacia los sillones lo suficientemente rápido como para captar a ambos vampiros mirándome de arriba a abajo- idiotas - murmure sacándolos de su trance antes de meterme de nuevo al vestidor.

-¡Oh vamos amor! -se quejo Nick haciéndome rodar los ojos- Tu los usabas para que hoy en día las chicas puedan no usar nada -agrego divertido y escuche la queja de Bekah mientras me cambiaba, cosa que me saco una ligera sonrisa.

Extrañaba esto.

Solo faltaba el moralismo indiscreto de Elijah y las bromas de Kol.

Los minutos pasaron mientras me cambiaba y mi linda hermana se quejaba de la música horrenda del siglo actual, salí enfundada en mis botas altas, mi cómoda falda a 4 dedos de los muslos y mi camisa de tirantes blancas mientras sostenía mi chaqueta negra entre mis manos.

-Comodidad al fin -me queje en un suspiro antes de aventarme en medio de Nick y Stefan.

-¿Por que tan gruñones? -se quejo Bekah aburrida.

-Oh tal vez por que necesitaba algo de ayuda de tu parte para que la estúpida bruja que me encontré supiera por que no puedo hacer híbridos ya que la linda Threa me esta castigando -añadió lo ultimo sonriéndome con sorna y yo sonreí encantada aunque con cierta culpabilidad en mi pecho.

Estúpida trihibrida.

-Una sola cosa, el collar y lo perdiste... -finalizo Nick sacándome de mi mente y suspire quitándole la copa de champagne a Stefan y bebiéndomela toda.

-No lo perdí solo no aparece hace 90 años -replico con tranquilidad y Stefan y yo compartimos una de esas miradas en donde el se preocupa por Elena y su vitalidad y yo estoy al punto del fastidio donde considero confesar que ella esta viva- ¿Qué te parece? -pregunta Bekah chasqueando los dedos frente a él para llamar su atención.

-Es lindo -replique con el mismo tono aburrido y rio suavemente antes de tirarme al sofá justo en medio de mi hibrido y mi mejor amigo con peinado de héroe, mientras mi linda hermana rubia lo mataba con la mirada y yo no podía aguantar mi risa- ¿Que? dije que me gusta -continuo obvio y hasta Nick soltó una risa mientras rodeaba mis hombros con su brazo.

-Yo se cuando mientes Stefan -replico molesta volviendo al probador y fue imposible reprimir la carcajada de mi garganta.

-Buen trabajo -se burlo Nick y rodé los ojos con una gran sonrisa sintiendo esa sensación de calidez por primera vez en meses.

-Tu le sacaste la daga del pecho -replico Stefan con gracia y reí aun mas.

-¡Ya los oí bastardos! -gruño Rebekah haciendo que Nick escupiera parte de la copa al estar riendo tanto.

Extrañamente me sentía en paz, alegra, no completa pero cerca de ello.

-Luces encantadora amor -alago Nick acariciando mi cabello y sacándome de mi trance.

Diarios de Vampiros: La Trihibrida OriginalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora