corazón de miel.

to. my lover

ambos sentados uno al lado del otro, mirando fijamente la noche estrellada frente a sus narices, las cuales se encontraban rojas y frías.

al igual que sus labios, rojos y hinchados de compartir besos hasta sentir que les dolían estos.

sus dedos entrelazados, unidos como si fuera la última vez que se fueran a ver.

el pecho de donghyuck dolía, su corazón palpitaba con fuerza y su mente estaba enfocada en una sola persona, mark.

se dio vuelta para ver a su amado el cual tenia la cabeza recostada en su hombro, apoyo la barbilla en la cabeza de este, apegándose más a el aun sin soltar el agarre de sus manos, sintiendo la calida respiración del castaño en su cuello, que por más raro que suene viniendo del moreno, no lo puso ansioso.

mark era la única persona que no lo ponía nervioso, que no podía enojarse con el, y si estaba enojado dejaba de estarlo al instante de verlo. la única persona que no hacía más que hacerle sentir un remolino de emociones en el estómago, que hacia que su más frio invierno sea la más calida tarde de primavera.

sonrió inconscientemente volviendo a sentir esas características mariposas en el estómago, cerro los ojos disfrutando el momento, olvidándose de cualquier cosa que no sea mark, su novio, el chico de sus sueños.

donghyuck acerco la mano de mark y planto un beso, lo que ocasionó que este se riera e levantara la cabeza del lugar para besar los labios del menor repetidas veces.

lo único que se podía escuchar en aquel lugar era los sonidos de los besos, las risitas y los te amo sueltos de los adolecentes.

porque el primer amor es el más dulce, donde tu corazón pertenece a la persona al lado tuyo, en el caso de donghyuck, a un adolecente que huele a sandia y toca canciones de mac demarco.

— te amo.

— te amo más.

un beso fue lo suficiente para sellar esa promesa, que bajo aquella luna de miel sera para siempre.

ambos sentados bajo la luna.

jurando su amor hasta que sus corazones dejen de palpitar en sintonia.