CAP 4: LECCION MORTAL

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Dos opciones que podrían cambiar nuestro futuro, solo una debía elegir.

Como verán últimamente eh estado descubriendo muchas cosas, ya recuerdo el nombre de Nichole, el de el niño y, que Lady Gaga esta involucrada en todo esto. ¿Que se borre todo? O arriesgar la vida de el pequeño, a el tratar de oponerme a la dosis y que tal vez aún así, nos inyecten.

Levanto la miraba al rededor de el cuarto y noto un ventilador, este era muy angosto, yo no cabría allí pero de todas formas eso no era lo mas importante. Si el pequeño cupiera dentro de el ducto, no arriesgaría la vida de nadie, solo la mía.

-¡ABRE LA MALDITA PUERTA!-se escucho un jodido terminator a travez de esta.

No respondí nada, reaccione rápido y quite la rejilla de el ventilador, hice señas a el pequeño junior, de que lo metería dentro de ese lugar.

-esta bien-me susurro sin soltar un solo quejido, el sabia perfectamente que esto era de vida o muerte.

Lo tome de la cintura y lo fui metiendo con cuidado, esto lo había visto en varias películas de acción y en todas funcionaba, ¿porque aquí sería diferente?.

-bien, será a la fuerza-aviso uno los terminators y comenzaron a patear la puerta con todas sus fuerzas, el sonido me ensordecía, era demasiado fuerte, voltee hacia esta y se empezaban a notar las huellas de las botas de los sujetos.

-dios-susurre en voz baja, a el pensar que si tan solo entraran me harían trizas.

Empuje a junior a el ducto, tomándolo por ultimo de los pies.

-oye si no te vuelvo a ver.. -le trataba de decir una frase emotiva a el pequeño, pero me me interrumpió.

-cállate, no le temas a el día que aun no ves, solo haz lo que tienes que hacer, y todo saldrá bien-me dijo el pequeño tranquilizándome, todo era al revés, se suponía que ese tipo de pláticas se las debería de dar yo.

-esta bien, trata de buscar a Nichole.-susurrábamos para que los tipos no escucharan que escondí a el pequeño.

-Ok a la de 3, E34 ¿terminaste la dosis?-los jodidos terminators estaban a tan solo unas patadas mas para derrumbar la puerta.

-No espera-respondió uno de ellos.

-quien es Nichole-dijo el pequeño viéndome fijamente.

-la mujer, la que tanto ves en las visiones. -Dije bajando la mirada, tal vez el pequeño no recuerde a mi amiga, y lo mas probable es que tampoco me recuerde a mi.

Cerré la rejilla, y me puse frente a la puerta, cerré los puños y dediqué unas ultimas palabras a junior.

-Tu hermana-el pequeño no respondió, solo se escuchaban las pequeñas abolladuras, que se creaban cuando el gateaba por los ductos.

-Dame eso-dijo uno de ellos

-que demonios haces, ya lo arruinaste-le aviso uno de ellos algo enfadado-le pusiste demasiado, puedes afectar la calidad de vida de Antoni.

-olvidaste algo, nosotros no estamos aquí para salvarle la vida a nadie-interrumpió otro terminator.

-entonces para que existe este búnker-reprocho uno de ellos disgustado.

-no te daré explicaciones, frente a el chico, escuchara todo.-aviso uno de ellos para luego dar la patada final y derrumbar la puerta.

Me escondí a un costado de la puerta.

El polvo,del contacto fuerte del metal,con el suelo se esparció por la habitación, luego los tres se pusieron de pie, sobre la puerta.

Dos de ellos estaban en posición de ataque, en cambio uno de ellos no lo hacia, estaba molesto con sus compañeros.

-L63, ¿no harás nada?-aviso uno de ellos, perdiendo la posición de ataque.

-no es que no quiera hacer nada, tan solo piensa en el lío que nos meteremos, si descubre la señorita que tu aumentaste la dosis a el doble.-respondió uno de ellos.

-ella no debe saberlo-interrumpió uno de los sujetos.

Se le quedaron viendo, fijamente por unos largos segundos, no lograba ver sus ojos pero, su lenguaje corporal lo decía todo. Lo amenazaban.

-Dame una razón, para participar en esto, una para matar a Antoni, una para traicionar a la señorita, y una para encubrirte Z83-dijo uno de ellos quejándose y apretando fuertemente los nudillos, viéndolos fijamente a los dos.

-L63, si no lo haces, ¡TE MATAREMOS!-respondió Z83 mientras le soltaba un golpe directo a la costilla, E34 lo empujo y de ese modo lo derribaron fuera de la habitación.

-idiotas-dije a el ver que peleaban entre si, en lugar de ir por mi, y no estaba mal, por lo menos estaría a salvo.

Tardaban los tipos en entrar así que deduje, que peleaban. Me asome por la ventana, y tenían a L63 colgado de la última planta, amenazándolo que, si se oponía lo lanzarían.

-Traidores-dijo L63 enfadado con sus compañeros, no lo pensé 2 veces y corrí hacia fuera de la habitación, directo a el elevador más cercano, tenía que escapar de esos tarados.

-¿Entonces, tu respuesta es si o no?-le pregunto a uno de ellos, mientras lo seguían amenazando.

-¡Escapo!-gritó E34, avisándole a Z83 para que le ayudara a perseguirme.

-Oh, no.-respondió su compañero y lanzaron a L63, a mi habitación.

-déjenlo-reprocho el terminator de corazón noble.

-quien me lo va a impedir, estúpido-respondió Z83 cerrando la puerta con seguro, como demonios salió ora puerta corrediza de la pared. Tal vez tengan muchas mas.

-vete a el carajo Adam-grito L63 con todas sus fuerzas, a lo lejos percibía sus golpes a las paredes.

-no digas mi nombre, L...

-oye se está escapando-interrumpió E34 corriendo hacia mi, con todas sus fuerzas como si me odiaran con toda su alma.

-Tonto, esto te dolerá más-anunció Adam mientras sacaba un arma de su espalda y apuntaba hacia mi.

El disparo me rozó pero no me logro hacer, ningún tipo de daño. El seguía disparando como si sus balas fueran infinitas.

El búnker estaba solo, todos dormían, y debido a eso no los podía perder.

-hijo de perra-susurro Adam mientras corría a el lado de E34 a máxima velocidad.

-puedes correr pero no esconderte-me aviso uno de ellos, me estaba agotando, pronto no podría seguir corriendo.

-ya veremos-les respondí, como si yo tuviera otro plan entre manos.

Seguí corriendo, y ellos también. Pasaron unos minutos y sus pasos se dejaban de escuchar, voltee y ya no estaban.

-pfff estuvo cerca-susurre mientras me alborotaba el pelo.

-y no pudiste esconderte-se escucho la voz de Lady Gaga que provenía de arriba. La loca callo a el suelo en posición de ataque-esto te costara caro-me dio una patada a el rostro, dejándome visco, me desconcerté por un rato.

Abrí los ojos, y la aguja ya me estaba penetrando.

SOBREVIVIENTES / EL COMIENZODonde viven las historias. Descúbrelo ahora