꧁𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 №16꧂

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Emilia Styles.

El collar alrededor de mí cuello llegaba a cubrir parte de mí pecho de lo grande que es. Perlas guindaban en una telaraña de pequeñas cadenas haciéndome brillar en resplandor de piedras.

El auto vuelve a estacionar pero está vez en mí departamento.

—¡Estás segura que quieres usarlo por primera vez, ahora?

Mí rostro se gira para mirar a Ana.

—Lo digo porque... Quedaría mejor con una vestimenta acorde al collar.

Asiento entendiendo su punto, mí vestimenta es muy formal y elegante en este momento, pero no es lo demasiado exótico para el collar.

—Es cierto. Lo usaré en una mejor ocasión.

Llevo mis manos a mí nuca retirando el collar de mí cuello para guardarlo en la caja.

Bajamos del auto y notó que Ana se distrae en su celular escribiendo con rapidez en el. Con una curiosidad por la tensión es sus manos creando un texto en su celular que crecía con rapidez, desde mi posición no lograba ver más que eso, ni siguiera el nombre del chat y sin olvidar la postura que tenía su cuerpo para evitar que pudiera ver la pantalla de su celular.

Cuando notó que su concentración solo iba a esas palabras que creaba en su celular me acercó con futileza, tan solo logro leer el nombre del contacto al que le escribía por qué en el segundo que sintiendo mu acercamiento pegó con búsqueda su celular a su pecho ocultándolo.

Mí mirada va a sus ojos que me miran con cierto desagradó, pero la sorpresa solo vino a mí cuando en sus labios soltó una amenaza dicha con su voz tensa e imponente:

—No vuelvas hacer eso.

Puede que no sea una amenaza, pero sus ojos y su voz conectaron en una demanda que te hace sentir amenazado.

—Vamos, subamos —dice disimulando el momento mientras entra al ascensor olvidando el momento anterior.

Al salir del ascensor, con mis llaves en manos me acerco a la puerta, tomó la llave, la introduzco en la manilla pero la puerta se abre.

¿¡Pero que le pasa a las puertas!?

—¡Sorpresa!

Al escuchar esa frase de distintas voces mis músculos que contraje para no alarma a Ana con una de mis posturas atacantes, se relajan de inmediato.

Mis ojos suben con una lentitud captado a las personas delante de mí y el estado que está mi departamento.

Estaba llenó de globos dorados como el oro.

Delante de mí estaba Ryan con su mano en la puerta, y detrás de él, Jessica con sus manos alzadas con globos de helio en ellas.

Un silencio se extiende en mí interior desconectando mis sentidos con el momento.

Cómo si el aire se fuera vuelto pesado como el agua, veo a Jessica correr hacía mí.

La venganza como justicia [COMPLETO]©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora