Cortesana Yuan Revoluciona En El Arte Teatral De Ser Un Té Verde

Me convertiré en tu padre y te daré un par de hermanos

Shen (Yuan) QianQiu era muy entrañable.

Luo BingHe no pudo evitar tener ese tipo de sentimientos románticos y extraños desde que comenzó a convivir con él.

Esa noche fue reprendido fuertemente por Meng Mo.

Pensó en algo mejor.

Se puso una cinta en su frente ocultando su marca demoníaca y meditó sobre sus decisiones.

A la mañana siguiente fue al burdel buscando a Shen QianQiu, al encontrarse reveló que él fue el que intentó asesinar a su hijo y se disculpó por ello, dijo alguna estupidez de como estaba drogado por alguna planta y como fue asediado por otros demonios y su cuerpo quedó medio conciente por ello.
Aseguró que confundió a su hijo con un destructor de mundos que casi termina con él.

También dió fe en que si es necesaria alguna compensación él haría lo necesario para conseguir su perdón.

Shen QianQiu al principio fue muy frío con él, ni hablar de Shen Jiu, fue aún peor.

Pero no hay nada que los encantos de Luo BingHe no puedan lograr.
Irónicamente fue aún más fácil acercarse a Shen Jiu que a Shen QianQiu, el niño no estaba tan alerta del mundo como debería estarlo.

Luo BingHe estaba contrariado en que clase de sentimientos tenía por ese pequeño Shizun, era extraño. Podría compararlo con esa vez que una demonio le dió alojamiento y comida en el camino del abismo, estaba preparado para pagar con su cuerpo pero la demonio negó, ella dijo que le recordaba a su pequeño hermano y no pensaba hacer actos carnales con él.
Tampoco sabía que trataba de lograr con acercarse a los Shen.
Nunca había sentido algo así y era verdad que aún había rencor dentro suyo pero antes de confrontar sus sentimientos por el mocoso, algo más floreció en su pecho.

Shen QianQiu era muy encantador.

No pudo evitar tener ese tipo de sentimientos románticos y Shen QianQiu no rechazaba sus afectos.

Luo BingHe fue claro con sus intenciones y no se anduvo con rodeos.
Cuando se confesó, Shen QianQiu estaba muy sorprendido y se alejó unos días de él. Luo BingHe creyó que fue rechazado y dejó de insistir.

Fue Shen Jiu quien lo buscó y le dijo unas cuantas palabras.

- Hey tonto, tonto, ¡Jia MingLuo! Más vale que escuches lo que tengo que decir -

Luo BingHe, alias Jia MingLuo, seguía recostado en el destartalado muelle, balanceando sus pies en el vacío.
Shen Jiu tenía la necesidad de patear su bonita cara estúpida.

Shen Jiu se sentó a su lado.

- ¿Sabes que mi padre espera que llegues a visitarlo? Sigue viendo la puerta con perdida, ni siquiera las payasadas de TianLang-Jun lo alegran -

Luo BingHe seguía teniendo la mirada perdida.

- ¿Por qué me dices esto? Seguramente prefieres a TianLang-Jun sobre mi humilde yo. No tengo mucho que ofrecerle a tu padre, no es mi primer amor, ni será la primera persona con la que tuve sexo. Lo que dijiste antes es cierto, no soy digno de estar en su presencia -

Shen Jiu suspiró de molestia.

- Tal vez eso sea verdad, pero los sentimientos de TianLang-Jun no son sinceros, así de fácil puede acoger a mi padre y así de fácil seguramente tomará más amantes. Los otros solo sienten mera lujuria, nadie valora a mi padre tal y como es, ni se tomaron el tiempo en descubrir sus pasatiempos ni intereses. Exepto tú, sujeto con apariencia de vagabundo -

Ninguno de los dos habló, Luo BingHe aún tenía sentimientos encontrados, ¿Debería seguir reaccionando a Shen Jiu con Shen QingQiu? Es decir, son la misma persona pero sus tratos son tan diferentes, ¿Que sucedió para que ese niño charlatán y estúpido se convirtiera en un hombre cruel y abusivo?