•Introduccion•
Minseok, un chico común y corriente, con una vida común y corriente, con una familia común y corriente, pero que todo cambio con un simple pero doloroso suceso.
Odiaba su cuerpo, su sonrisa, su cabello, sus ojos, sus manos, odiaba todo de si, pero nadie lo sabía pues el se encargaba de que nadie se diera cuenta de todo lo que ocultaba, todo lo que sufría, todo lo que detestaba de si mismo.
No le tenia la suficiente confianza a nadie para decirle por todo lo que pasaba, por lo que decidía guardárselo para si mismo, aun que esto incluyera aguantar las lágrimas cada noche por la impotencia y el dolor que sentía.
Minseok tenia una familia rota, y se acordaba de ello cada vez que escuchaba a sus padres discutir, los sollozos de su madre y el fuerte golpe de la puerta cada vez que su padre se iba de casa para volver al día siguiente. También recordaba lo rota que estaba su familia al pasar frente a aquella puerta negra que en letras grandes decia "No entrar, solo MinMin".
Ese era el apodo que le daba ella, una de las primeras mujeres que amo en su vida (aparte de su madre y su abuela) su hermana mayor, Hyemei. Por la cual, con solo 10 años se entero de lo que significaba la palabra muerte y suicidio.
Esa chica que siempre sonreia, que nunca se quejaba de nada, llevaba un infierno en su interior, del cual lograba escapar gracias a su pequeño y adorado hermanito. La chica siempre pensaba en una forma de morir sin dolor, de que nadie se enterara y poder irse en paz, y encontró la forma un día que tomo pastillas para dormir, quedando cada vez mas cerca de la muerte abrazada a lo único que extrañaría, a Minseok.
Este jamas supo el por que de que Hyemei halla echo tal estupidez, pero jamas la juzgo, si ella había decidido terminar antes con su vida, respetaba su decisión.
Minseok después de la muerte de su hermana, de que sus padres no pudieran estar juntos sin discutir, y de ya no saber que hacer consigo mismo, comenzó a cambiar. Dejo de comer, de dormir, inclusive de salir de casa, pues solo lo hacia para ir a la escuela, en la cual le iba pésimo, pues su cabeza ya no estaba para los estudios, produciendo tensión en si mismo, provocando que cayese en un estado delicado, enfermando gravemente, anemia era lo que tenia.
Con tan solo 12 años comenzó a valerse por si solo, sus padres lo único que le daban era un techo, comida y dinero para vivir, pues ya ninguno de los dos pasaba en casa.
A los 13 años conoció lo que volvería a llenar su vida de color, la musica. Descubrió un talento que jamás pensó que tendría, el canto, el cual lo ayudaba a distraerse, y el cual le dio un gran regalo, después de 3 años desde la muerte de su hermana volvió a tener amigos. Xiao LuHan y Byun BaekHyun, ambos chicos, LuHan de su misma edad y BaekHyun un año menor, se hicieron sus amigos gracias al profesor de musica, el cual los presentó para que incluyeran a Minseok en el taller de canto, ambos chicos gustosos lo hicieron.
Los tres jamas se separaban, eran como hermanos,y gracias a ellos Minseok pudo volver a confiar en alguien, tanto así que decidido, para su cumpleaños número 14 los invito a su casa, contándoles lo de su hermana y familia. Ambos chicos tristes pero felices por saber que su amigo confiaba en ellos, decidieron ayudar a su amigo.
Tanto LuHan como BaekHyun querían mucho a Minseok, por lo que trataban de que este siempre estuviera sonriendo, y lo conseguían, creyéndose sus sonrisas, creyéndose sus "estoy bien", creyéndose sus risas, nunca se dieron cuenta de que Minseok sabia fingir demasiado bien.
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•Capitulo 1•
Ese día despertó antes de que la molesta alarma lo hiciera levantarse por lo que logro entrar al baño antes que lo hiciera su padre, el cual comenzaría a discutir con el o con su madre por cualquier cosa.
