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Claro que sabia a donde ibas.

El además de conocerte más que nadie en este mundo, había obtenido una pista mientras torturaba a esa pobre muñeca.

-TE MATARÁ! LO HARÁ Y TODO ESTO QUE CONSTRUISTE SE VA A CAER! -

Sus palabras de odio lo llevaron a pensar en posibilidades, no había forma de que recordaras donde terminó su caja, ni el sabe exactamente ya qué corriste una gran distancia ese día para escapar de su agarre.

Pero había algo, durante ese tiempo te observó y notó ese libro tan importante, así que supo que habría que detenerte.

Tal vez un último juego te haría cambiar de parecer.

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Pasaron unos días.

Habías encontrado un poco de dinero en el departamento de Tim, lo suficiente como para comprar lo necesario como comida, agua una linterna y... Un martillo. Todo eso lo guardaste en una mochila que tomaste del cuarto de Tim.

Con eso empacado te encaminas por la carretera hacia el bosque y una vez que el letrero "Parque Rosewood" se encuentra frente a ti, tus pasos se detienen, recordando esa figura alta sin cara que te habías encontrado ahí la última vez. Esta vez no habría quien te ayudara, tendrás que hacer esto sola y el darte cuenta de esto te da un escalofrio qué recorre tu espalda de abajo a arriba.

Porfin logras qué tus pies den los primeros pasos, entrando en el amplio bosque qué antes se encontraba frente a ti.

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Gracias a tus habilidades lograste leer el mapa del parque qué tomaste, guiándote por el y cosas conocidas como árboles y rocas.

Cada sonido te ponía alerta y la sensación de estar siendo seguida no desaparecía, así que constantemente volteas a tus alrededores, esperando no encontrarte con alguien o algo más que qué quisiera hacerte daño.

Al cabo de un tiempo te encontraste con un edificio enorme a lo lejos, te acercas más pensando que es lo que buscas pero al hacerlo ves una mansión sombría y enorme y algo llamándote a entrar. Das unos pasos hacia la puerta delantera y esta se abre con un chirrido, revelando un rastro de sangre que conduce adentro.

-nope - diste media vuelta y comienzas a caminar en dirección contraria - no me toca a mi, ya tengo suficiente con un juguetero loco tratando de matarme, o peor-

Y sin más te alejaste de ese lugar.

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Tal vez habías escapado de un peligro pero caminaste directo a otro, por que al llegar a tu destino te encontraste con ese hospital en el que te habían alojado por tu amnesia, solo que este ahora estaba extrañamente deteriorado.

Ventanas rotas, maleza creciendo y nadie a la vista.

Podría ser mala idea entrar pero no había opción, debías encontrar el libro, así que no te diste tiempo de dudar y abriste la puerta principal, pero al hacerlo un olor horrendo te hizo retroceder.

- qué...? - cubriendo tu boca y nariz con tu brazo te asomas y vez todo en oscuridad, así que decides sacar tu linterna y alumbrar adentro.

No parece haber nada, solo mucho desastre en el suelo de la sala de espera del lugar, pero no hay que confiarse, después de todo solo logras ver una reducida parte.

Con cuidado te adentras en el hospital, viendo por donde pisas y alumbrando todo lo que parezca sospechoso con tu linterna, pero justo haciendo eso logras ver por el rabillo del ojo una silueta de alguien sentado en la sala de espera.

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Por favor díganme si hay errores ahhhhhh ya vi muchos en el anterior anterior :c 

Amnesia (Jason The Toy Maker) (continuación) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora