[Boy pussy]
Jake un jovencito de 17 años, un muy buen estudiante que vive en su propio departamento, junto con su perro Choco un Doberman de dos años.
Estos hacían todo juntos, eran los mejores amigos y lo más importante se amaban mucho.
Un día mientras Jake hacía un trabajo en su habitación y a su vez escuchaba un poco de música, Choco se encontraba en la sala de estar jugando con su hueso favorito.
Una vez terminado el trabajo Jake decidió entretenerse de otra forma más divertida para el, así que encendió su computadora y busco un tipo de video en especifico. Hace poco había descubierto videos de personas teniendo sexo con sus mascotas y desde esa vez no pudo dejar de verlos e imaginarse a el mismo con su querido perro, con solo imaginarlo ya se sentia demasiado mojado, y no pudo evitar tocarse pensando en el siendo follado por su amado perrito, el cual en ese monento se encontraba subiendo las escaleras hacía la habitación de su bonito dueño, al escuchar sonidos raros saliendo de esta.
Cuando estuvo adentro, pudo visualizar a su dueño arriba de su cama, con las piernas abiertas mientras tenia un par de dedos enterrados en su coño, no pudo evitar acercársele al notar los jugos de este mismo escurrirse desde su apretado coñito hacía la cama, al sentir el delicioso aroma que este desprendía pasó su áspera lengua digustando el asombroso sabor, y siguió haciendolo tratando de conseguir más de aquella esquisites.
Jake al sentir la lengua de su amigo perruno no pudo evitar soltar un gemido de sorpresa y placer, sacando sus dedos de dentro de el y llevando estos mismos hacia su bola de nervios masajeandola rudamente.
-Ahhhh~ Choco~- Gimió de puro placer, acariciando con su mano libre la cabeza del can.-Más cariño, a papá le gusta mucho~-
El can al sentir esta caricias siguió con su trabajo, lamiendo ese precioso coño, enviandole descargas de placer al joven, quien no paraba de gemir complacido.
Jake sintió que Choco dejo de lamer su coño y empezó a embestir tratando de entrar en el, así que se separo un poco de este y se bajo de su cama colocandose boca arriba a orillas de esta con parte se su torso arriba y con sus piernas abiertas invitando al can a enterrar su gran polla en el. El cachorro no perdió el tiempo y coloco sus patas delanteras en el torso de su dueño, colocándose en medio de sus piernas y empezó a embestir sin llegar a entrar en el coño del mismo, pero no hizo falta mucho tiempo para que la polla de el cachorro se enterrara bruscamente en ese jugoso y apretado coño que minutos atras estuvo lamiendo ansiosamente, así iniciando una serie de rudas embestidas sin importarle el estado en el que se encontraba su amado dueño.
-Ahhhh, ¡Choco, basta, estas lastimando a papi!- Dijo mientras gemía ruidosamente.
Pero al can poco le importaba, su dueño era la hembra perfecta para el, y siguio embistiendolo hasta que en una de esas tantas embestidas toco el punto de su perrita, generandole un placer inigualable.
Jake solo gemia gustoso por ese placer tan grande que le generaba su amigo perruno, estuvieron así un buen rato, cuando finalmente Jake se corrió a chorros alrededor de la enorme polla de su cachorro, mojando así su pelaje y parte de el piso con estos, quedando bastante sensible como para sequir resistiendo las fuertes embestidas que Choco le proporcionaba.
-AHHHH~ Choco basta~- Sollozó Jake devido a la sobreestimulación, sus piernas no podian dejar de temblar, estaba muy cansado, y el can aun no se detenia.
Choco siguió embistiendo a su hembra hasta que finalmente se liberó dentro de Jake, quedándose adentro de el debido a que el nudo se habia formado dejandolos juntos hasta que este bajara, Jake finalmente pudo descansar, se sentia lleno y viscoso debido a los fluidos que liberaba su amigo aun dentro de el, sintiendose sensible por la sobreestimulación que recibió, paso sus dedos por su bolita de nervios tratando de aliviar la sensación extraña de esta, sintiendo su estomago incharse debido al nudo de su amigo peludo.
Cuando el nudo bajo, Choco pir fin pudo salir de el maltratado y rojo coño de su dueño, quien con la respiración agitada, se deslizo hasta el piso quedando sentado en este aun con sus piernas abiertas y con el semen del can escurriéndose, Choco al ver su semenbsalir de ese exquisito coñito empezo a pasar su lengua nuevamente haciendo gemir a Jake hasta que no saliera ni una gota de semen más, al terminar de hacerlo se acerco al rostro de su bonito dueño lamiendo este también, Jake abrio su boca dejando que la lengua de su perro la invadiera, chupando y gimiendo en esta. Luego se arrodillo hacercandoce al pene de su perrito lamiendolo limpiando cada rastro de semen que podria haber quedado.
Ya demasiado exhausto se dirigio a su cama acostandose en esta y llamando a su amigo para que se recueste con el, Jake no lo iba a negar le encanto hacer eso con su preciado cachorro, y esperaba que se repitiera todas las veces posibles, pero ahora solo necesitaba descansar un rato, tal vez podrian volver a hacerlo más tarde, de todas forman solo eran ellos dos en la casa y nadie podria interrumpirlos. Jake solo queria ser la perrita de su hermoso amigo Choco cuantas veces a este se le apetezca.
