El (mal) Sueño de Harry

4 0 0
                                    

Harry Potter se despertó en medio de la noche, sudando y con el corazón latiendo con fuerza. Había tenido un sueño horrible en el que su amigo Dobby, el elfo doméstico, había muerto.

Se levantó de la cama y se acercó a la ventana para respirar aire fresco. Miró hacia el cielo nocturno, tratando de tranquilizarse. Pero la imagen de Dobby sin vida seguía apareciendo en su mente.

Preocupado, Harry decidió que necesitaba hacer algo para asegurarse de que Dobby estuviera bien. Así que, sin pensarlo dos veces, tomó su varita y sus zapatos y se dirigió a la casa de los Weasley, donde sabía que Dobby trabajaba.

Cuando llegó, encontró a Dobby en la cocina, preparando un pastel de manzana para la familia Weasley. Dobby lo saludó con entusiasmo y preguntó si necesitaba algo. Harry no pudo evitar mirar a su alrededor, asegurándose de que todo estuviera bien.

"Dobby, tuve un sueño horrible. Soñé que... que algo te había pasado", dijo Harry, tratando de ocultar su preocupación.

Dobby se preocupó al ver la expresión en la cara de Harry. "No te preocupes, señor Harry, Dobby está bien. No ha pasado nada malo", dijo el elfo doméstico, tratando de tranquilizarlo.

Harry se sintió un poco mejor al escuchar eso, pero aún estaba preocupado. Decidió quedarse en la casa de los Weasley esa noche para asegurarse de que todo estuviera en orden.

Más tarde esa noche, cuando todos estaban dormidos, Harry se levantó de la cama y se dirigió a la cocina, donde encontró a Dobby sentado en una silla, mirando hacia el cielo nocturno.

"¿Estás bien, Dobby?", preguntó Harry.

"Sí, señor Harry. Dobby solo está pensando en su futuro", dijo el elfo doméstico.

"¿Tu futuro? ¿Qué quieres decir?", preguntó Harry.

"Dobby quiere encontrar un trabajo donde pueda ayudar a los demás. Dobby quiere ser libre y hacer su propia vida", explicó el elfo doméstico.

Harry entendió perfectamente lo que Dobby quería decir. "Dobby, si necesitas ayuda para encontrar trabajo o para cualquier otra cosa, solo tienes que pedírmelo. Estoy aquí para ayudarte", dijo Harry con una sonrisa.

Dobby se conmovió con la oferta de ayuda de Harry. "Gracias, señor Harry. Dobby lo aprecia mucho", dijo el elfo doméstico con lágrimas en los ojos.

Harry se sintió aliviado al ver que Dobby estaba bien y prometió ayudarlo en todo lo que pudiera. Se despidió de Dobby y volvió a la cama, sintiéndose más tranquilo que antes.

Pero la imagen del sueño todavía estaba presente en su mente. Harry sabía que tenía que recordar que sus amigos y seres queridos estaban bien y no dejar que sus miedos lo abrumaran.

Harry Potter y los FANFICS MalditosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora