EL SOMBRÍO QUE DEJASTE EN MÍ

SORPRESAS INESPERADAS

Hola, soy Khalie una chica en la cual se enamoró y tuvo un noviazgo con la persona que ahora ama, pero lamentablemente no terminó bien, hasta ahora me sigue doliendo su partida, pero empecemos desde el principio.

Yo conocí a un chico cuando cursaba el último grado de la secundaria, él ya era egresado, lo conocí por una salida con mis amigas y él afortunadamente también estaba invitado, se presentó, dijo su nombre y a qué carrera iba a postular ese año, su carrera era ingeniería electrónica, mis amigas también se presentaron ante él y expresaron las carreras a las que pensaban postular, hasta que me tocó a mí, pues me presenté diciendo mi nombre y a la carrera que pensaba postular después que acabe mi secundaria y exactamente era medicina, empezamos a hablar en grupo sobre nuestras preferencias y que metas a futuro teníamos, él siempre sonreía ante todo y hacía gestos que daban a entender lo interesante que le parecía la opinión de mis amigas, incluso cuando también yo expresaba las mías, se veía que respetaba cada una de las ideas que se decían y que lo comprendía rápido y fácilmente, a simple vista pude deducir que era muy atento, responsable y muy organizado con las cosas que se proponía, su nombre era Luis, quién imaginaría que desde esa salida no dejaríamos de hablarnos y tiempo después se volvería mi novio, pedimos para comer algo ya que de tanta plática nos había dado hambre, mis amigas fueron a pedir y me quedé a esperarlas con Luis, estaba sentada, el silencio invadía el lugar, hasta que me miró fijamente y me dijo: ''Pasa algo?'', le dije que no pasaba nada, solo que no tenía un tema en específico del que hablar o al menos no tenía algo pensado, entonces el propuso algo, conocernos, no nos presentamos de nuevo, porque ya habíamos dicho nuestro nombre, así que fuimos de frente a hablar sobre nuestros gustos musicales, de comida, estilos que más nos gustaban, incluso hablamos hasta de política, me sentía conectada en esa parte con él, pues pensábamos lo mismo de ello.

Llegaron mis amigas con pedidos de carapulcra y pollo broaster, empezamos a repartir en platos pequeños para cada uno y comimos, la carapulcra era uno de mis platos preferidos, total siempre elegiría ese plato ante todos los que existen, simplemente me encantaba, mientras comíamos, charlábamos de cómo nos estaba yendo en la ''vida'', terminamos de comer y decidimos ver una película que nos gustase a todos, y sorpresivamente a la mayoría le gustaba terror, incluyéndome a mí, así que elegimos una película de terror, mientras tanto fui a la cocina a preparar cancha y repartirla entre todos, estaba en la cocina y sentí algo detrás de mí, voltee y era Luis, me preguntó...

-En qué puedo ayudarte Khalie?

- Ah, Luis, podrías traerme una tasa para echar ahí la cancha, un favor

- Vale, ya te la pasó

- Gracias, Luis

- No es nada, Khalie

Terminé de preparar la cancha y la eché en la tasa que me había alcanzado Luis y me dirijo a la sala, Luis iba detrás de mí, me senté y dejé la tasa en la mesa, al instante empezaron a agarrar para comer, por otro lado, una de mis amigas más cercanas se me acercó y me dijo:

- Que pasó con Luis en la cocina?

- Nada, solo me estaba ayudando a preparar la cancha y más nada

- Segura que solo eso?, no sé, lo veo algo interesado en ti

- No hables tonterías, no quiero estar con nadie ahora

- Lo sé, pero nunca es malo intentar

- Aun así, no pasa nada con él, solo fue acto solidario de su parte

- Bueno, si tú lo dices

En realidad, no pasaba nada con él, Mayle solo era un poco exagerada cuando se refería a coqueteo o amor, algo en lo que yo no quería, o bueno no estaba tan interesada en ese tema, no le tomaba tanta importancia, se hizo de noche y la película ya estaba por terminar, todos se veían muy cansados, la verdad es que yo también lo estaba, quería ir a casa, tomar una ducha y echarme en mi cama a descansar un poco, porque al día siguiente me tocaba clases, pero decidí quedarme un poco más, terminó la película y todo estaba hecho un desastre, me quedé a ayudarla a limpiar a mi amiga y Luis también se quedó, terminamos de limpiar y me despedí de ella y él también, salimos afuera y estaba llamando a un taxi hasta que Luis me dice que dónde vivía y que si me podía acompañar para asegurarse de que llegué bien a casa, entonces fui con él, todo el camino estuvimos en silencio, solo nos mirábamos y sonreíamos el uno con el otro, llegué a mi casa y me dijo:

-Ten dulces sueños Khalie, espero duermas bien

- De hecho, si debo dormir bien, mañana me toca clases

- Entiendo, yo también pasé por eso, ahora soy egresado

- Lo bueno es que es mi último año, me estoy esforzando más para tener buenos resultados

- Esa es la vibra que se necesita, irás bien, suerte con eso

- Gracias Luis, ya entraré, hasta luego

- Sí, hasta luego Khalie... verdad ¿me pasas tu número?

- Ah, sí claro, no lo había pensado, apúntalo

- Vale, ya está, ya lo apunté, cualquier cosa que necesites, avísame, quizás te pueda ser de ayuda

- Vale, muchas gracias, ahora si entraré

- Sí, adiós Khalie

- Adiós, Luis

Entré a mi casa, y fui directo a tomar una ducha, me cambié mi ropa de dormir, la más cómoda que tenía y me eché en mi cama, pensé un poco en el gesto carismático y bueno que había tenido Luis, pero a otra cosa no daba, apagué la lámpara y cerré mis ojos y solo dije: ''Ten buena noche Khalie''.

Ya era de mañana, el reloj marcaba las 6: 10 am, tome una ducha rápida, me hice el desayuno y empaque mis cosas para ir a clases, un poco apurada, pero nada mal, la hora se me había pasado y estaba a punto de llegar tarde, hasta que llegué justo a la hora, toque la puerta del salón...

-Buenos días miss, ¿puedo pasar?

- Khalie... si puedes pasar, adelante

- Gracias miss

Justo comenzaba la clase, me calmé, me concentré y presté atención a la explicación, mientras tanto por otro lado veía una pareja demostrando su amor en plena clase, a lo que la profesora no observó, porque sino ya los hubiera botado o quizás mandado a dirección, a decir verdad, cuando veía parejas así pensaba en que yo no quisiera estar así, era cómo qué ni el mil años quisiera llegar a estar hasta ese punto de cariño o carisma por una persona, simplemente daba mucho que hablar y lo único que quería dar a hablar eran mis calificaciones, claro mi meta era ser la mejor de este año y alcanzar un buen puntaje cuando acabe mi secundaria y eso me beneficiaría en la universidad, además me llenaría más de conocimientos que de hecho necesitaba mucho, me serviría.

Llegó la hora de recreo, me senté a comer con mis amigas en las bancas que había en el colegio y charlamos un poco de lo que habíamos traído, en sí para estas cosas éramos muy abiertas en poder expresar y todo, no como esos grupos apagados, incluso algunas veces nos pasábamos, pero nada grave a nuestro parecer, cosas que se pueden solucionar muy fácilmente, así que no tendríamos por qué preocuparnos por ese tema, sin embargo Mayle empezó de nuevo a hacer sus preguntas tontas, ella siempre las hacía, pero no divulgaba eso a los demás, es decir no decía temas personales que le cuentan a ella a los demás, en eso era reservada, es lo que más me gustaba de ella, más personas como ella, por favor.

-Cuéntame, que pasó con Luis después de que nos fuimos

- Nada, solo me acompañó a mi casa y me pidió mi número, por si es que necesitaba ayuda en algo del colegio, el me ayudaría

- Ya están progresando, que astuto resultó

- Nada que estamos progresando, deja de hacerte ideas, solo es un amigo Mayle

- Amigo?, te pidió tu número Khalie, eso fue impresión buena a primera vista, ¿no crees?

- Sí, lo creo, pero más nada

- Yo creo que se verán más seguido ahora, cualquier cosa cuéntame, yo te apoyaré

- Vale, pero enserio solo es mi amigo

- Como digas Khalie

Mayle suele ser un poco fastidiosa a veces, pero ahora era más, puesto que hace mucho no me veía hablar con un hombre y ahora que lo hago me molesta más que anteriores veces, según ella estamos avanzando, tonterías que se le ocurren, pero bueno, llegó la hora de salida, me despedí de Mayle y mis demás amigas y caminé hacia la puerta con dirección a mi casa hasta que...

-Hola Khalie, ¿estudias aquí?

- Hola Luis, si estudio aquí, ¿Qué haces acá?

- Oh, mi hermano estudia acá, vine a recogerlo

Ay no, lo que había dicho Mayle se hizo cierto, ahora lo vería más seguido, porque su hermano estudiaba en el mismo colegio que yo, se ofreció a llevarme a mi casa, le agradecí y listo.