CONNIVANCE, payton moormeier.

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Ha pasado mucho tiempo desde que pisé un club nocturno, Val.

Los clubes nocturnos solían ser una rutina para mí, he pasado innumerables noches en clubes de todo el mundo. No podría nombrar uno solo. Me desmayé en todo tipo de mierda en ese entonces. Nunca he tenido que hacer cola para entrar ni preocuparme por tener suficiente dinero en efectivo en el bolsillo para pagar las bebidas. Yo era rico y famoso en ese entonces.

Yo era VIP. Coño muy importante.

O... ¿es persona?

Persona muy importante tiene más sentido.

Lo que pasa con ser rico y famoso es que nunca tienes que pagar por nada, es realmente raro. Tenía tanto dinero, pero creo que nunca tuve que pagar por las bebidas, los clubes simplemente te las daban porque estaban felices de que estuvieras en su establecimiento.

Bueno, ahora estoy arruinado.

Sigo siendo famoso, pero no en el buen sentido.

Y si me ven en el club nocturno de alguien, no me premiarán con alcohol gratis. Me premiarán con un viaje gratis a prisión.

Afortunadamente, colarse en un club nocturno concurrido es fácil. Tanto alboroto, tanto ruido, tanto grito de borracho e inclinación. Nadie le presta atención a un tipo con una sudadera con capucha oscura que está al acecho. Probablemente deberían, me veía muy inquietante. Lo que pasa con un bullicioso club nocturno de Nueva York es que todo el mundo está demasiado egoístamente preocupado como para darse cuenta de lo que sucede a su alrededor.

Lograr colarme dentro del club fue fácil, encontrarte, ángel, es lo que sabía que sería difícil.

Todo tu horario decía que ibas a estar en este lugar a esta hora. No sabía por qué, pero sabía que probablemente lo averiguaría. Al principio, tenía la impresión de que viniste aquí para soltarte. Pero luego me di cuenta de que soltarse probablemente no sería algo que escribirías en un horario. Tenías que haber estado aquí con algún tipo de tarea, tal vez un trato.

Al entrar al club con la cabeza gacha, pronto me siento abrumado por la multitud mezclada con el ritmo estruendoso de Hey Baby de Pitbull y T-Pain que vibra en mi pecho. Creo que nunca antes había entrado sobrio en un club nocturno. ¿Son siempre así de abrumadores? Los gritos, las luces estroboscópicas invasivas, los cuerpos chocando entre sí. Llevo menos de cinco minutos en este ambiente y ya quiero tomarme unos chupitos para tranquilizarme.

Estoy aquí solo esta vez, sin decirles a los chicos que me iba. No quería que se sintieran obligados a venir considerando que fallé el último intento y perdí el tiempo de todos. Puse a todos en peligro para encontrar a Valene en The Plaza, luego, cuando logramos capturarla, lo arruiné.

Necesitaba ir solo para este. Ni siquiera es que tenga mucho de un plan, solo quiero verla. Tengo una necesidad obsesiva de asegurarme de que esté bien. Quiero tenerla a solas si es posible. Un lugar concurrido como este puede permitirme escabullirme con ella. Si no, también está bien. Mientras pueda verla, eso es todo lo que me importa.

¿Esto me convierte en un acosador?

Son las doce y cuarto de la noche, los muchachos probablemente estén perdidos en casa de Dez ahora mismo. Creen que me fui a casa a la cama como suelo hacer a esta hora. No tienen idea de que estoy al otro lado de la ciudad en un club nocturno espiando a Valene. No es que sea de su incumbencia. Se siente un poco raro mentirles sobre mi paradero. Los últimos nueve meses nos han hecho ligados unos a otros. Huir juntos de la policía nos ha hecho apegarnos por las caderas. Ya no estoy acostumbrado a hacer nada sin ellos.