Prólogo

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Roseanne Park.
Seúl, Corea del Sur.

Agité mis manos con delicadeza y sacudí mi cabellera rubia con cansancio, había dormido muy poco debido a los pensamientos, estrés e ideas que tuve durante la noche, además de la organización de los proyectos de fotografía que he tenido los último...

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Agité mis manos con delicadeza y sacudí mi cabellera rubia con cansancio, había dormido muy poco debido a los pensamientos, estrés e ideas que tuve durante la noche, además de la organización de los proyectos de fotografía que he tenido los últimos meses.

Recargué mi cabeza en mi escritorio, había pasado toda la tarde organizando cuidadosamente cada uno de los proyectos y fotografías, a la vez que planificaba cada cosa a la perfección y ordenaba los eventos y trabajos en mi agenda; había estado tan ocupada últimamente que no tenía mucho tiempo libre, menos tiempo para mí.

Me levante de la silla decidida a tomar un baño, masajeé mi nuca completamente adolorida y solté un quejido al escuchar un crujido cuando giré la cabeza. Llené la bañera al tope y me sumergí en el agua una vez ya desnuda, cerré los ojos lentamente intentando liberarme de todo el estrés con el que cargaba día con día y sólo concentrarme en mí por un momento.

Relajé mis músculos al sentir la templanza del agua en todo mi cuerpo. Por un momento me dejé llevar y me liberé de todas las energías negativas

Luego de tomar un baño, rodeé mi cuerpo en una de las cálidas toallas que tenía a la vista, caminé hacia el espejo del baño y contemplé mi rostro con atención.
Las grandes bolsas debajo de mis ojos iban creciendo cada vez más, me veía fatal, siendo bastante sincera.

Corrí a mi armario y tomé lo más cómodo que pude hallar, aunque odiaba postergar, necesitaba dormir bien para poder ser más eficiente y aumentar mi rendimiento en el trabajo.

Me vestí rápidamente, y coloqué un poco de bálsamo de miel en mis labios con mi dedo anular.

En mi recorrido hacia la pequeña cocina de mi departamento pude escuchar el timbre sonar, caminé lentamente hacia la puerta y en cuanto abrí una figura femenina corrió a abrazarme con fuerza por el cuello, reconocí cada detalle de esa mujer en cuestión de segundos, era...

—Jennie...

—Te extrañe como no tienes idea, Rosie, solo ha pasado una semana desde que no te veo, se sintió eterno... —dijo aferrándose más a mí para luego dejar un pequeño beso en mi mejilla—. Te conozco y se que no te has estado alimentando bien por todo el estrés, se que tienes mucho trabajo pero no tienes que dejar que te consuma, que consuma todo tu tiempo. Traje mucha comida, quiero que te relajes, y dejes de pensar en todo lo que te atormenta.

No pude evitar sentirme querida al ver como Jennie se preocupaba por mí. Tomé su cintura y la atraje hacia mí en un suave movimiento, observé detenidamente cada una de sus facciones, realmente era hermosa; sus lindos ojos, con esa mirada felina que me hipnotizaba, sus labios abultados y sus pómulos definidos.

Ella era especial. Una de esas personas que vienen a tu vida alegrarte, animarte y amarte, llegan a tu vida como un escape de lo monótono de la vida y hacerte un poco más feliz, de esas que aterrizan en tu vida con nada más que buenas intenciones. Ella era una de esas personas, prácticamente, un ángel para mí.

Holaaa, aquí la autora, se que no he actualizado mi otro historia pero realmente me llegó la inspiración y quise escribir esta

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Holaaa, aquí la autora, se que no he actualizado mi otro historia pero realmente me llegó la inspiración y quise escribir esta. Espero tener tiempo para actualizar mis ff frecuentemente.

Besos, Lilies on the moon

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⏰ Última actualización: May 07, 2023 ⏰

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𝐆𝐨𝐫𝐠𝐞𝐨𝐮𝐬 - 𝐂𝐡𝐚𝐞𝐧𝐧𝐢𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora