Prólogo

398 38 17
                                    

Un enorme nudo se había formado en la garganta del felino atigrado, lágrimas comenzaron a asomarse por las esquinas de sus ojos entre naranjas y amarillos que estaban cerrados con fuerza, bajando sus orejas, calló al suelo, devastado comenzó a jadear mientras sus sollozos eran cada vez más fuertes, las lágrimas al fin comenzaron a salir como cascadas, salpicando sus mejillas con agua.

El cielo, que en un inicio era de un brillante tono azul, era ahora de un deprimente gris oscuro. Preparándose para recibir a la próxima tormenta que azotaría a la ciudad, la brisa del viento golpeó su cuerpo, erizándolo por la fresquedad que sentía.

Seguía llorando desconsoladamente mientras tallaba sus ojos, intentaba parar de llorar, pero las gotas seguían cayendo de una en una.

-N-No.. ¡NO! - Gimió de furia y tristeza, destrozado por dentro llevo su pata a su pecho y lo apretó -¿P-Por qué? - se preguntaba a si mismo; sus garras rasparon en pavimento, negó con la cabeza, con la respiración cortada.

La había respetado, cuidado y querido con todo su pequeño corazón, le obsequio todo su amor junto con pequeños detalles, era atento, si ella estaba enferma, el se quedaba a su lado mientras se recuperaba, dejo muchas cosas atrás por Ivy, a muchas personas que el apreciaba con tal de estar a su lado.

¿Por qué? ¿Qué hizo para merecer esto? ¿Por se merecía que el mundo de diera un golpe tan fuerte?, suficiente como para tirarlo al suelo y obligarlo a llorar y gritar desconsoladamente.

Sollozo aún más fuerte, mientras los felinos que pasaban a su lado miraban su cuerpo tembloroso, mostrando una cara de simpatía y pena por la situación del pobre chico.

Un trueno resonó a lo lejos, sus heridas y moretones ardían cómo el infierno, el dolor era casi insoportable, pero no sé comparaban con el dolor de la nueva herida que se había abierto en su corazón.

Ivy le había sido infiel... Otra vez.

Lo había descubierto apenas el día de hoy, había salido para poder comprar un regalo para su amada, pues el día siguiente celebrarían su segundo aniversario de pareja, y por supuesto el felino tenía que prepararse para esa fecha tan importante. Sin embargo, paralizado por la desgarradora y terrible escena, se encontró a su amada junto a otro felino mientras compartían un apasionado beso.
Lleno de ira y frustración se abalanzó en contra del otro felino para comenzar una pelea, de la cual, Calvin saldría mal herido.

Los gritos de su ex amada inundaron sus oídos, intentaba detenerlos para hablar sobre esta situación, pero fue inútil, el felino comenzó a golpear a Calvin con tanta fuerza que sus nudillos se llenaban de sangre, en un momento de descuido el felino atigrado logro asestar un golpe al contrario, que lo hizo retroceder. La cabeza y corazón de Freckle le pedían a gritos que corriera de ahí, y así lo hizo.

Fue así como terminó a las puertas de un famoso restaurante, lejos de todo el alboroto que había ocasionado.

Temblaba cada vez más fuerte mientras sentía las sirves gotas de agua caer por todo su cuerpo, la atmósfera era deprimente y el clima no ayudaba. Con lágrimas en sus ojos se levantó con las pocas fuerzas que aún le quedaban, tembloroso se apoyó en una pared para salir de ahí lo más rápido que pudiera. Gimió de dolor, agarrándose el estómago por la paliza que había recibido, sintiendo una horrible opresión en su pecho.

-¿Cómo pudiste hacerme esto? ¿Cómo?.. ¡Yo te amaba con todo mi corazón!.. ¡yo te amaba!.. - grito al viento que revoloteaba su pelaje, con su corazón destrozado.

Su cuerpo y ropa fueron empapados por la lluvia que no paraba de hacerce cada vez más fuerte, tragó saliva y miro al cielo, lanzando un suspiro de tristeza, avanzaba cojeando mientras con su pata se limpiaba la sangre de las comisuras de sus labios.

Su cabeza miraba hacia abajo, sin importarle cuando se mojara a causa de la lluvia.

No tenía a dónde ir, el hogar donde solía vivir y compartir estaba construido a base de mentiras y engaños, su mirada vago hacía las ventanas del restaurante, posándose en una familia que compartían una comida, hablando y divirtiéndose todos juntos.

Una familia... Era todo lo que quería en esos momentos, el también llegó a tener una.

Lackadaisy, pero no, no podía ir ahí, sería el primer lugar en el que Ivy lo buscaría, y no quería ni verla de reojo, a demás, no quería molestar a Mitzi con sus asuntos personales, ni a los demás del bar.

¿Pero entonces a dónde podría ir?

Sus ojos se abrieron lentamente, mirando a un gato con un traje azul y un sombrero que caminaba por el local.

De repente una cara conocida paso por la cabeza de Freckle junto con una idea, apoyó su pata derecha en el cristal y se seco las lágrimas que estaban combinadas con la lluvia.

No tenía otra opción, el era el único que lo podía ocultar y ayudar, brindándole un hogar temporal, su mejor amigo de la infancia, el era alguien en quien podía confiar, tenía que.

No tenía más opciones, necesitaba ir con el.

Necesitaba ir con Rocky

Necesitaba ir con Rocky

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


✨♣️𝐉𝐔𝐍𝐓𝐎 𝐀 𝐓𝐈♣️✨ 𝙲𝚊𝚕𝚟𝚒𝚗 & 𝚁𝚘𝚌𝚔𝚢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora