⎯ rɘd dɘsert.﹝𝟶𝟺﹞

121 26 30
                                    

Mentiría si dijera que no se estaba divirtiendo, realmente Jungwoo la estaba pasando mejor de lo que alguna vez lo hubiera hecho en su vida, estaba disfrutando de observar al nervioso alfa moviéndose por la cafetería mientras atendía su pedido.
Siendo las únicas personas ahí a esas horas de la madrugada era demasiado notaría la pesada mirada del omega en el cuerpo del mayor mientras se relamia los labios.

Jaehyun no estaba tan seguro si era debido al pastel o a él.
Nunca antes lo habían hecho sentir tan nervioso, mucho menos un frágil omega, ese era su trabajo, no al revés, Jeong estaba acostumbrado a tener a todos a sus pies y sentir que no tenía el control de algo hacía que sus nervios se pusieran de puntas.

Desde la primera vez que sus ojos se encontraron el delgado cuerpo debajo de él, desde que le dijo su nombre con una sonrisa Kim Jungwoo y su exquisito aroma no volvieron a abandonar su cabeza.

Soltó un suspiro para tomar valor y acercarse a la mesa de aquellos ojos curiosos que lo observaban meticulosamente, dejando con cuidado el pedido, acomodandolo con gracia.

—¿Qué te trae a un café a las... — Una pausa fue tomada para revisar la hora en su teléfono, sorprendido por lo tarde que era. —3:00 am Kim Jungwoo-ssi? ¿No crees que es muy tarde para que un omega ande por ahí? Es peligroso.

La risa de Jungwoo llenó los oídos de Jaehyun, deleitándose con la melodía que ocasionaba. —Jeong Jaehyun-ssi, ¿Desde cuando somos tan cercanos para que te tomes tantas libertades de preguntar sobre mi vida personal? — Preguntó alzando una ceja, cortando un pedazo de su preciado pastel y llevándolo a su boca contento.

—No es de buena educación responder a una pregunta con otra, ¿No te lo enseñaron tus padres? — Tomó asiento en la silla frente al pelinaranja sin siquiera pedir permiso, observandolo con sus brazos cruzados sobre su pecho.

—No tuvieron tiempo para hacerlo ya que están muertos, pero sí me enseñaron a que no debo sentarme en un sitio donde no he sido invitado. — Respondió de manera burlona, sabía lo que pretendía el alfa, podía olerlo.

Los alfas siempre querían estar por encima de los omegas, querían ser la figura de autoridad, que todos babearan por ellos.

Y Jaehyun no se alejaba demasiado del estereotipo de un alfa.
Su padre, quien era líder de una manada de alfas lo había criado lejos de la mujer que lo dió a luz, haciendo crecer a Jaehyun con la idea de que ningún omega era suficiente.
Aunque no era un extremista como su padre, Jaehyun no podía evitar mirar a los omegas hacía abajo, como si ninguno estuviera a su altura, en sus 21 años de edad ningún omega había logrado llamar su atención, por lo que siempre pasaba su celo solo, hasta que el pelinaranja apareció en su vida, con su gran altura que parecía gritarle
"¿Quién te crees para intentar mirarme hacía abajo, enano?"

Aunque fuera tan sólo unos centímetros más alto que él eso no era normal en un omega.

Saliendo de sus pensamientos, movió su cabeza incómodo por la respuesta del más alto, arrepentido por preguntar por sus padres pero molesto por la actitud descortés, "¿Por qué ese omega tenía que ser tan malcriado?" se preguntó a si mismo, intentando disipar todos los pensamientos obscenos que aparecían en su mente sobre él educando al omega, él no era así de ninguna manera, no sabía porque estaba actuando de una forma tan irracional cada que Jungwoo estaba cerca, su cuerpo gritaba que lo tomara y no lo dejara ir, que era suyo y de nadie más, que debía protegerlo.

"Mío, mío, mío, mi omega, quiero que sea mío."

¿Por qué Kim Jungwoo no podía ser como los demás omegas que iban a sus partidos de basketball y eran fáciles de ignorar?
¿Por qué si tan sólo lo había visto dos veces lograba volverlo un loco que deseaba su tacto?
¿Por qué no podía sacarlo de su cabeza en ningún momento del día?
¿Por qué le dedicó en su mente un tiro de 3 puntos exitoso en su último partido cuando sólo lo había visto una vez antes?

rɘd dɘsert.﹝♡̶﹞jaewoo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora