¿Serás Tú A Quién Estoy Buscando?

::Cap 10:: Una Piedra En El Camino

[Narra Jonah]:

Ahora sentía que era capaz de gritar a los cuatro vientos mi amor por Noah, ya no podía ni quería ocultarlo más.
- ¿En que piensas bonito?
- Que de ahora en adelante ya no tendré que ocultar lo que siento por ti, ni quiero ocultarme de nadie ya que jamás me avergonzaria de quien soy ni mucho de ti, te amo.
Su rostro lo decía todo, estaba literalmente mudo, sus ojos se cristalizaron. No podía creer que yo haya sido capaz de decirle aquellas palabras.
Está demás decir que después de eso ambos nos besamos.
Un beso que recordaré por siempre.
Pero cada buen momento, a veces, termina de forma abrupta y esta vez no fue la excepción, un teléfono comenzó a sonar sin saber que era el mio.
Tomé el aparato y quedé pálido al ver que me estaba llamando Corbyn, uno de mis compañeros en Why Don't We.  Quedé totalmente shockeado que dude si contestar o no.
- Quien te está llamando, mi amor?
- Es Corbyn, que querrá?
Noah, al escuchar el nombre de mi amigo, me quitó el teléfono y lo apagó.
- Mi amor que pasa, por qué me quitas mi celular?
Y empezó a decirme lo de siempre que ni él ni los demás me merecían y que él sobre todo era un mal agradecido.

Nuevamente mi teléfono empezó a sonar, quise contestarlo pero mi ojiverde, aún tenía el equipo.
- Por favor mi amor, déjame contestar y ver que quiere, puede ser importante - Le hice puchero ya que no quería pelear más y al él no le quedó otra opción que devolvérmelo.
- Hola, Corbyn que tal, dime puedo ayudarte en algo?
- Hola amigo menos mal que contestas, mira necesito contarte algo, resulta que Lena y yo hemos dedido viajar a Río De Janeiro dentro de los próximos dos días y estaba pensando que podríamos vernos ya que alguien me contó que también andas por tierras brasilera, que dices Jonah?
Estaba en blanco no sabia que responderle.
Quería decirle que si, que no había ningún problema y eso pero por otro lado, estaba mi novio, quien no se veía muy contento.
- Jonah, ¿sigues ahí? - Se escuchaba por el teléfono.
- Si, si aquí estoy y avísame cuando estés en el aeropuerto e iré a buscarte, dale saludos a Lena.
Noah no estaba feliz con lo que acaba de hacer pero no le quedó otra que aceptarlo y resignarse.
Traté de cambiarle el tema porque ya no quería discutir más con él, lo amaba demasiado y cada discusión por muy pequeña que sea me terminaban afectando.
- ¿Y ahora que planes tienes en mente amor?

Logré sacarle una sonrisa a un tan serio Noah, y su sonrisa era tan hermosa era tan hermosa que me daban ganas de llenarlo de besos.
Nos tomamos de la mano y juntos comenzamos a caminar por las pintorescas calles de Río.
Caminamos durante unos veinte minutos hasta llegar a una plaza pública que tenía un piano de libre acceso, cualquiera podía tocarlo e incluso yo queria sentarme y tocar algunas melodías pero recordé que tenía un brazo inutilizable lo que me hizo mirar a Noah con tristeza.
- ¿Qué ocurre mi amor?
Le señalé mi brazo y de manera no verbal le dije lo obvio. Él simplemente tomó mi cabestrillo e intentó sacármelo pero me negué.
- Lindo, se que ahora estás lastimado y que yo soy el culpable de eso, me siento mal por esto pero se que tienes ganas de tocar este hermoso piano y un simple yeso no va impedir que lo hagas, permíteme ayudarte a quitarte esto, quiero que todo el mundo te vea tocar y ojalá pueda oír tu linda voz, te amo Jonah, te amo mi niño bonito - Me dio un corto beso en los labios y me quité el cabestrillo, el dolor en brazo fue insoportable al principio pero en cuanto toqué las teclas de aquel piano, el dolor simplemente desapareció y sin pensar en nada más comencé a tocar  recordando canciones de Why Don't We por supuesto, luego algunas canciones clásicas con las que me enamoré del instrumento y también toqué la primera canción que aprendí cuando tenía 15.
Me sentía como un niño con juguete nuevo y mientras tocaba vi y sentí como las personas se acercaban a mirar, a grabar y a aplaudir. Amaba el amor de las personas que sabían valorar la buena música lo que a la vez me puso nostálgico al recordar los conciertos de Why Don't We y cuanto extrañaba a los chicos.
- Bueno eso es todo, ahora debo irme, gracias por sus aplausos no saben lo feliz que me han hecho y gracias Noah  digo amor por darme la fuerza que necesitaba y ahora si no molesta quiero mi coso devuelta, me duele, te amo.
Esa tarde noche ambos regresamos a casa. Any y Joalín estaban sentadas en la sala.
- ¿Volvieron ya? ¿Y por qué están tan contentos?
Ambos nos miramos y dijimos lo que ya todos sabían.
- Pero hoy ya es oficial, hoy me pidió ser su novio y acepté, te amo Ojitos verdes - Lo besé.
De pronto, sentimos como Joalín se paraba de golpe del sofá y se iba a la habitación, que antes era la de Noah, dejándonos preocupados a todos.
- Creo que iré a hablar con ella - Dijo el ojiverde.
Any y yo nos quedamos conversando un rato donde aproveché para preguntarle que le había pasado a la chica.
- Joalín nunca superó a Noah y por eso tuvo que renunciar al grupo y creyó que aquí lo iba a reconquistar pero apareció una piedra en el camino y esa eres tu Jonah e incluso, ella pensó que lo de ustedes e^ra solo un juego.
No podía disimular mi tristeza al saber que Joalín se refería a mi como "una piedra en el camino".
- Pero tu tienes que estar tranquilo, él ya te eligió a ti, Joalín tendrá que aceptarlo no le queda de otra además yo ya te quiero y gracias por traernos a Noah de vuelta.
- ¿Traerlo de donde?
Any comenzó a contarme que él siempre ah sido muy solitario y aunque lo veían feliz por dentro sufría al no encontrar a la persona ideal como para tener una relación. Además dijo que desde que me conoció a él le habían vuelto a brillar sus ojos.
- Ese chico te ama, no lo pierdas o le romperán el corazón, ambos se terminaran destruyendo.

- Lo se pero puedes estar tranquila que yo a Noah nunca le haré daño, lo amo.
Luego, Any y yo fuimos testigos de como Joalín salía de su  habitación hecha una furia.
- Te odio - Vino directamente a increparme.
Pero no pasó nada, solo fue un momento incómodo al que rápidamente olvidamos.
Ya habían pasado cinco dias y mañana de aquel viernes que parecía ser un día normal, recibo una llamada a mi celular la que me hizo despertar abruptamente, era Corbyn para decirme que ya estaba en Río y quería que lo fuera a buscar.
- M*erda - Dije exaltado - Mi amor Corbyn ya está aquí y debo ir por él al aeropuerto, ¿Vas conmigo?