¿Te ha pasado que conoces a una persona diferente a ti y sientes una chispa con ella? La puedes conocer en la escuela, en la calle, en el mercado literalmente en cualquier parte del mundo como si el destino te pusiera a esa persona en tu camino con algún propósito. Esta es la historia de una amistad que surgió por casualidad, pero se convirtió en algo increíble, unico y valioso. Las amistades comienzan en los momentos mas inesperados y casuales. Muchas veces no somos consientes de que una simple conversación puede dar pie a un nuevo inicio y desarrollarse en algo mas profundo y especial, una conexión única hasta podría decir que es mágica. Ella era Mikaela García, una joven apasionada e independiente, con una sonrisa que iluminaba cada rincón de su ser. Él era Agustín Sierra, un joven tranquilo y reflexivo, cuyos ojos reflejaban una sabiduría más allá de su edad. Sus trayectorias nunca se habrían cruzado si no fuera por una serie de coincidencias y circunstancias que parecían orquestadas por algún poder superior. El universo, en su infinita sabiduría, decidió que sus caminos debían encontrarse, y así lo hizo. Sin embargo, lo que hace especial a esta amistad trasciende las casualidades del destino. Mikaela y Agustín anhelaban una amistad inusual, algo que desafiara las expectativas de la sociedad y superara las barreras impuestas por las convenciones. Ambos anhelaban un amigo en el que pudieran confiar plenamente, sin temor a que surgiera el amor romántico y complicara su relación. Mikaela había vivido experiencias dolorosas en el pasado, donde la amistad había dado paso a sentimientos románticos no correspondidos. Ella quería evitar a toda costa que eso volviera a suceder. Por otro lado, Agustín había sufrido también las consecuencias de relaciones donde la amistad se tambaleó debido a los enredos del corazón. Ambos creían firmemente que la amistad genuina entre un hombre y una mujer era posible, sin importar sus orientaciones sexuales. El mundo solía encasillar la amistad entre hombres y mujeres en un molde preestablecido: ocurría solo si había algún tipo de atracción romántica o sexual. Pero ellos sabían que la amistad era mucho más compleja y poderosa que eso. No necesitaba el combustible del deseo o la pasión para existir. La amistad era un vínculo único, una conexión profunda y sincera que podía florecer entre almas afines, empatizando y apoyándose mutuamente, sin importar su género u orientación sexual.Tú como lector iras descubriendo como se desenvuelve esta bella historia.
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TODO ES TU CULPA LUCIFER
Teen FictionDos jóvenes se conocen en la secundaria y sin creer lo que pasaría después de unos años de salir de ella se enfrentarían a las adversidades de la distancia y la falta de comunicación, un suceso atroz los hace reunirse y unir fuerzas para enfrentar l...