𝚇𝚅

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Pasadas las horas y sin aviso de algún doctor le turno de la recepcionista termino dando paso a la del turno nocturno, al desaparecer el sonido de los tacones chocar contra el suelo.

Una puerta rechino dando paso un tipo con bata blanca, cubrebocas y careta, recorrió con su vista el casi vacío pasillo hasta toparse con los Jeon.

camino hacia ellos—Disculpen, ¿son familiares del joven Kim Taehyung?—y después de horas Jungkook por fin reacciono levantándose rápidamente

—Soy su novio—hablo sin titubear, aquel medico lo miro con pena y suma tristeza

—lamento darte esta noticia chico, pero mis colega y yo no estamos muy seguros de que tu novio pase de esta noche—y por un momento Jungkook dejo de respirar pues la opresión en su pecho era inmensa

—¿cree que podamos...?—no termino de preguntar la señora Jeon cuando el medico asintió despacio 

—¿sabe dónde localizar a los padres del joven?—la mujer sin dudar negó 

—su padre no tiene una relación buena con el—el medico asintiendo suspiro  

—bien, al ser los únicos familiares presentes los dejare pasar, después de todo no le queda mucho tiempo—hablo con lastima

La madre de Jungkook lo tomo del brazo pues este de nuevo no reaccionaba, entraron al elevador y el doctor presente presiono el botón número 5.

En cuanto las puertas del elevador se abrieron el doctor camino en dirección a la habitación 203, una vez frente a esta y soltando un suspiro abrió la puerta dando el paso a las personas tras él.

El incesante temblor en las piernas de Jungkook al entrar y ver a su novio en una camilla con cables alrededor suyo lo hicieron sentir un vacío abrumador.

Caminando con pasos torpes y realmente pesados llego hasta el costado derecho de la camilla, la pálida piel adornada con manchas moradas, rasguños y cortes suturados le dieron la bienvenida cuanto miro a su novio.

Miro las grandes manos de su pareja y sin dudarlo tomo una de estas, apenas y se podía sentir el calor del cuerpo contrario, miro a su madre dándose cuenta que el señor de blanco no se hallaba más en la habitación.

Y de forma rápida las lágrimas caían de sus ojos, su madre se acercó a él y sin mediar palabra lo abrazo.

Minuto tras minuto pasaban haciendo la noche más oscura, la señora guio a su hijo al pequeño sofá de la habitación para ambos sentarse ahí y bajo las caricias de su madre a Jungkook el cayo en un profundo sueño.

Los pitidos de la maquina fueron despertando a Jungkook, su ojos ardían, los tallo un poco para despejar más su vista, las imágenes de anoche lo golpearon.

En cuanto su vista paro en Taehyung inconscientemente camino hasta ahí, acerco una silla al lado de la camilla y tomo asiento en la misma.

Con nerviosismo de hacerle aún más daño tomo la mano de su pareja y como si Taehyung estuviera esperando aquel tacto, dio un leve apretón a la mano de contrario.

Jungkook sorprendido y emocionado pico con insistencia en botón para llamar a la enfermera, aun en su interior había esperanza de que su amado estuviera a salvo.

—¡¿Que sucede?!—entro la enfermera dispuesta a revisar al paciente

—¡apretó mi mano, y-yo...!—sin dejarlo terminar y sin siquiera avisar lo saco de aquella habitación y segundos después unos médicos ingresaron a esta con prisa

No sabía que pasaba, él pensó que aquella reacción por parte de Taehyung había sido algo sumamente bueno, pero ahora lo dudaba.

—¿Que pasa cielo?—llego tras él su madre quien había ido por un poco de comida para su hijo 

—N-No lo sé, llame a la enfermera para decirle que Tae había apretado mi mano y tan pronto entro me saco—el chico se giró a su madre

—no te preocupes cielo, de seguro hizo eso para revisar sus signos vitales—trato de tranquilizarlo su madre—lo mejor será esperar y mientras lo hacemos hay que comer algo—con un poco de necedad por parte del menor caminaron a la cafetería del hospital

Una hora más tarde cuando ambos terminaron de comer regresaron a la sala de espera y justo cuando entraban el mismo doctor que los llevo a la habitación de Kim caminaba con seriedad hacia ellos.

Jungkook temió lo peor—Buenos días, el joven Kim esta afortunadamente estable por lo que pide ver de inmediato al joven aquí presente—hizo un ademan señalando a Jungkook

No bastaron dos veces para decirle que fuera y corrió hacia el  elevador para dirigirse hasta la habitación del chico.

Al abrirse las puertas del elevador corrió hasta la 203 y sin tocar entro a la habitación encontrando a un Taehyung sumamente diferente a la noche anterior.

—Tae...—las lágrimas se agolparon en sus aun hinchados ojos y camino despacio hacia el 

—Jungkook—susurro el chico

—pensé que iba a perderte—sollozo hincándose a un lado de la camilla, tomo la mano de su pareja y repartió besos por la misma

—Jungkook...déjame verte—el mencionado acato la orden y fijo sus ojos en los de Taehyung levantándose del piso

—no me gusta verte así—confeso

Taehyung miraba a su amado grabando  cada detalle de su rostro en su cansada mente, con dificultad trago saliva y empezó a hablar.

—sabes Kookie, cuando estaba pequeño mi madre siempre decía que la muerte seria nuestro último viaje, el más largo, pero el mejor de todos—Jungkook comprendió lo que pasaba, agacho su cabeza para dar paso a las lagrimas

—¿Qué fue lo que te dijo el doctor?—hablo con la poca fuerza que quedaba

—Cuando las personas están en su lecho de muerte o a nada de fallecer reúnen las fuerzas suficiente para cumplir sus promesas—el menor miro a su mayor

prometiste que no me dejarías—con su temblorosa mano acaricio la mejilla de Taehyung 

—no estoy rompiendo mi promesa—le hizo saber

—pero...—la pálida mano de Kim se poso en la mejilla de Jungkook

No te diré adiós mi Kookie, porque en un día de luna llena nos volveremos a encontrar—Jungkook en un intento fallido retenía sus lágrimas para ver con claridad a su amado

—pero hoy es luna llena Taehyung—el mencionado sonrió con cansancio

—nunca cambiaras—acaricio los labios del menor—acércate—Kim miro los labios de su pareja con dulzura y paso los mismos hacia las galaxias de su novio—¿recuerdas aquella vez que me preguntaste el porque te llamaba Luna?—susurro

—lo recuerdo—hablo en hilo de voz

—cuando te miraba a lo lejos, veía un brillo especial, a pesar de sufrir y estar casi roto por dentro tu sonrisa iluminaba a cualquiera, eso me llevo a ponerte el apodo Luna, pues a pesar de que temías y temes a la soledad, siempre lo estas, sin embargo nunca dejaste de brillar—ambos lloraban, se miraban con amor, tristeza; con dolor—así que quiero que lo siguas haciendo, aunque yo no este contigo—Jungkook junto su frente con la de Taehyung—Promételo—el menor cerro con fuerza los ojos, sus sollozos se escuchaban cada vez mas

—no lo lograre—abrió de a poco los ojos para mirar a su estrella poco a poco apagarse

—hazlo por mi—finalizo besando los labios del contrario

La presión que se ejercía en aquel beso de despedida fue disminuyendo su fuerza cuando Taehyung por fin descanso en paz.

Y Jungkook al percatarse de aquello grito, grito con fuerza sintiendo como su garganta quemaba, sentía que de apoco se desgarraba.

No paso mucho tiempo cuando la puerta fue abierta con brusquedad, los doctores trataban de separar a Jungkook del inerte cuerpo de Taehyung, su pecho dolía, todo se derrumbaba a su alrededor.

Para el, todo se terminó. 


Capítulo dedicado para: @SofiaKT27 y @ValentinaFlores242  

Dulces SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora