—¡¿Se puede saber qué haces?! —Digo separándome.
—¿Qué he hecho? —Dice mirando a la izquierda y al techo, está nerviso o quizás haciéndose el tonto. La segunda opción tiene más sentido.
—Pero, ¿quién te crees que eres para besarme cuando y donde te dé la gana?
—Sólo ha sido un beso sin importancia.
—¡A mí no me vengas con esas! —Levanto la voz enfadada.— Conozco tu estrategia de juego y yo no seré tu ficha para mover. —Arruga su frente.
—¿Pero qué estás diciendo? —Mi móvil suena interrumpiendo nuestra discusión.— ¿No vas a contestar?
—¿Qué pasa Ruth? —Me pongo el móvil en la oreja.
—¿Dónde estáis ambos dos? —Me pregunta.
—En las escaleras, ¿por qué?
—Liam ya ha salido de quirófano.
—Vamos para allá. —Digo y cuelgo el teléfono.
—¿Qué pasa? —Me pregunta Joe.
&Nada, vamos, Liam ha salido ya. —Joe se levanta.— Joe, no te pego un tortazo por educación y respeto a las personas que nos rodean —enfatizo personas, dejándole totalmente claro que él me da igual—. Así que, ni se te ocurra volver a besarme porque no te llevas un tortazo, te llevas siete. —Joe rompe a reír con unas carcajadas que me ponen nerviosa.— ¿Qué coño te hace tanta gracia?
—Cuando te enfadas, eres tan graciosa.
—No se puede ser más idiota, en serio. —Me llevo la mano a la frente para intentar tranquilizarme, pero no puedo. Este chico me saca de mis casillas.
"Relájate Anne, eso es lo que él quiere; tranquila."
Empiezo a caminar sin él, pero en pocos segundos se pone a mi lado. No lo soporto. Creo que él piensa que estoy haciéndome la difícil o algo parecido, y más equivocado no se puede estar. Lo miro y sigue con esa sonrisa. ¿Qué he hecho para merecer esto?
Llego al pasillo —omitamos a Joe por unos momentos— y observo como allí me esperan todos.
—¿No había salido ya? —Pregunto.
—Sí, pero todavía no nos dejan verlo. —Dice Pauline.
—Los efectos de la anestesia aún están presentes. —Añade Will.
Más tarde nos comunican que ya podemos pasar pero como somos muchos —diez en total—, nos ruegan que pasemos en dos grupos de cinco y que esperemos una hora mínimo. La enfermera dice que nos volverá a avisar cuando podamos entrar. Joe, Will, la hermana y los padres de Liam, entran primero formando el primer grupo. Y media hora después, Gemma, Lucy, Pauline, Ruth y yo.
—Ya podéis entrar vosotras. —Dice Joe que rodea con sus brazos la espalda de la madre de Liam.— No llores más, Helen. —La intenta consolar, los dos se sientan. Lucy también está llorando. Creo que no ha sido buena idea haberla dejado entrar.
Le doy un abrazo a la pequeña Lucy, y después me uno a Gemma, Pauline, Ruth, Lucy, quiénes avanzan por el pasillo acompañadas de Will hasta la habitación.
—No le agobiéis, está cansado. —Dice Will agarrando el pomo, su sonrisa es triste.
Dejo entrar primero a las demás, yendo yo la última, para poder abrazar a Will. Tras el abrazo entro en la habitación y veo a Liam allí tumbado lleno de cables, de sondas y cosas de esas. Me dan miedo los hospitales, y va muy en serio.
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El Susurro de Anne
Dla nastolatkówPuede denominarse superación o persecución de sueños. Llame como se llame, es lo primero en lo que piensan al escuchar mi nombre. ¿Y por qué será? Un día, por alguna extraña razón, decidí cambiar mi vida. No es nada fácil arriesgarlo todo sabiendo q...