El día transcurrió con normalidad, la única cosa nueva que hizo fue ir a la enfermería que estaba en la escuela a preguntar cuanto tiempo hacía efecto un supresor y le mencionaron que 3 a 4 días así que prefirió no tomar otro, pues al tomarlo eran demasiadas hormonas que no sabía cómo controlar. Así que decidió confiar en el efectividad de la pastilla.
Antes de clase, se dirigió a la casa de Tae y poder recuperar las cosas que habían sacado de su antigua casa. Al llegar a la propiedad, se estacionó en la acera y se bajó hasta llegar y tocar la puerta, dando un paso hacia atrás en cuanto la omega le abrió la puerta con una sonrisa y se acercó inmediatamente a abrazarlo
—Pequeño, que has vivido en estos días—Dijo y mantuvo al omega entre sus brazos, dejando pequeños pesos en la cabeza de este
—Muchas cosas, pero estoy bien, las cosas han mejorado. Gracias por permitir que mis cosas estuvieran aquí. — la señora Kim asintió con la cabeza y se adentró a la casa dejando a Jimin en la puerta y que avanzará con tranquilidad
—Puedes dejar lo que quieras y venir por ellas en cuanto te desocupes—
—sí, no son muchas cosas, pero gracias. Iré a revisar las cosas y veré cuales se irán a la basura y cuales me quedo yo—
—Bien, cualquier cosa me llamas y te ayudo. Qué bueno es volver a tenerte en casa Mimi—
Jimin asintió y subió a la habitación de Tae antes de que las lágrimas se hicieran presentes en el omega.
En cuanto llego a la habitación de su mejor amigo, vio las 3 cajas que se encontraban con sus cosas, sin querer abrirlas, se acercó y abrió para dejar ver ropa que no se volvería a colocar. A menos que sea que se la haya comprado el mismo.
Al separar la ropa que se quedaba y la que iba a regalar, siguió con la caja que tenía los trabajos que hasta este punto había realizado en la universidad.
Era obvio que iba a mantener estos, así que dejó esa caja con todo lo que había en su interior
Al abrir la siguiente caja, no se esperó lo que se esperaba pues conocía a la perfección la caja de terciopelo que años atrás le causó problemas. La tomó y abrió para dejar a la vista el anillo con el eclipse en este. Se permitió soltar algunas lágrimas de frustración cerrando la caja y aventando la en el interior de la caja de cartón.
En cuanto se tranquilizó, siguió viendo lo que traía y eran las cosas de valor que alguna vez fueron de sus padres y suyas.
Se levantó y comenzó a cargar las cajas hasta el auto que le había dejado el alfa. Guardando estas en la parte trasera.
Al terminar, se despidió y condujo de regreso al departamento que le había prestado el alfa, subió las cajas con ayuda del portero.
Cuando las cajas estuvieron en la sala de él departamento, dejo estas ahí e ir a darse un baño. Pues tenía clases en un par de horas.
Al adentrarse en el baño, se quitó la ropa y dejo ver algunas de las marcas que se habían quedado por el agarre del alfa. Estas se encontraban en sus caderas y algunas en su cuello. Deteniéndose a admirarlas y a tocarlas mientras recordaba cómo es que se habían formado. Soltando un jadeo al recordar los labios sobre su cuello y sus dedos enterrados en su cadera cuando le estaba follando.
—Dios Jungkook—Fue lo único que dijo el omega, caminando hasta la regadera y comenzar a ducharse. Relajando su cuerpo al contacto del agua caliente
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Nuova Sacra Utuixchel Unita
Fanfic-¿Cómo te llamas?, yo me llamo Jungkook, ¿sabes dónde estás?- preguntó con lentitud y con un tono relajado, esperando no ponerlo más nervioso de lo que ya estaba, uno de los cabellos largos del menor estaba atravesado entre sus ojos, quería acomodar...