Contrato [3]

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Hoseok

— ¡Maldito inútil! ¡Ni para eso sirves, maldita zorra! — insulto interrumpiendo mi clase de baile

La maestra me miro con pesar y salió de la habitación, dejándome a solas con mi padre. Ambos sabíamos lo que pasaria, sabia lo que mi padre enojado podía hacer. Yo retrocedi al ver su estado, no estaba entendiendo nada pero me daba miedo de lo que pudiera hacerme.

— ¡Solo una cosa tenias que hacer! ¡Solo una! — grito con frenesí, acercándose para tomarlo del cabello y tirarlo al suelo, algo común en un descontrol de la situación.

— ¡Maldita zorra! ¿Qué no habías dicho que salió bien?

— Padre ¿Qué fue lo que hice?

— ¿Qué fue lo que no hiciste? — remarcó con las venas marcandose en su cuello — ¡Te dije que te comportaras, maldita zorra! — volvío a gritar dando el primer golpe a su rostro, ese rostro que de tantos golpes que recibía no podía herirse con facilidad.

— ¿A qué se refiere? — pregunto en un hilo de voz, estaba llorando pero no sabía si eran por los golpes o por la idea que se asemejaba en su pensamiento.

— ¡No pudiste conseguir a Kim, basura! — estallo agitando las manos en el aire — ¡Y no puedo culpar que el no quiera una porquería como tú! — volvió a estallar la palma de su mano contra su mejilla, quella de dónde habían salido lágrimas traicioneras que humedecian su piel pero sus golpes no dolían, no como lo hacían sus palabras.

TaeHyung no quería a una basura como el.

Mintió

TaeHyung

— Vamos, TaeHyung — dijo el menor de los park, siguiendo a su amigo.

Aquel pelinegro caminaba directo a su oficina, siendo molestado por la persistencia de un rubio chismoso.

— No — remarcó entrando a la oficina.

— Ooh vamos, cuentame qué tal te fue con el chico — persuadió entrando antes de que cerrará la puerta por completo.

— Fue bien, eso es todo — la respuesta superficial de sus palabras solo evidenciaban la obviedad con que evitaba hablar como si escondiera algo, y eso lo sabía aquel rubio.

— ¿Bien o más que bien? — pregunto acercándose demasiado, intentando hacerle hablar pero solo obtuvo un golpe en la cabeza, un zape.

— Alejate — dijo levantando los papeles en su escritorio — Es bonito pero no es como me gustaría que fuera mi pareja, supongo que podría ser mi amigo. Es adorable — dijo totalmente sincero, porque así era.

No quería a alguien que bajara la cabeza sino a alguien que la levantara siempre, no con arrogancia sino con dignidad, alguien a quien no fuera fácil obtener y su carácter fuera digno de alguien sabio y decidido.

Hoseok no era ni la pizca de eso.

— Asi que lindo — dijo con burla levantando las cejas, insinuando algo más — Bueno, si dices no querer pero es lo suficientemente bueno para que el gran Kim TaeHyung acepte que es lindo, entonces lo quiero yo.

— Como quieras, no lo agobies — respondió restandole importancia, pero la imagen de ese bonita sonrisa al lado de su amigo…no le gusta.

Toc toc

Los golpes a la puerta lo hicieron levantar la vista ante su hermano que caminaba en su dirección, parecía serio pero relajado. No le había gustado que rechazara a Hoseok, según sus palabras el era alguien muy bueno pero aceptaba su decisión, no podía hacer otra cosa.

One shots [Vhope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora