Our Destiny | Mikey / Manjiro Sano | +18 (Terminada)

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El nacimiento de mis pequeños fue una bendición, ambos eran unos pequeños ángeles, y aunque ya desde recién nacidos tenían personalidades muy diferentes, eran adorables y se habían ganado el corazón de todos apenas los conocieron

Por obvias razones no me quedé en el hospital mucho tiempo, apenas mi doctora comprobó que todo estaba bien conmigo y los pequeños me enviaron a casa para que estuviera segura y a salvo, claro que nos había dado una lista de cuidados que debía tener por varios días y ella pasaría por el edificio de Bonten a visitarnos y poder controlarnos, tanto a mi como a Emma, quien había tenido a un lindo niño fuerte y saludable

A pesar de que ambas estábamos en el hospital y que habíamos llegado juntas, a la hora de volver lo hicimos por separado, en realidad durante mí estadía en el hospital, la cual había durado solo unas horas luego de que mis hijos nacieran, no había visto a nadie

Llevaré a los niños, lleva a Kai a la habitación- pidió Mikey cuando llegamos al edificio de Bonten

De acuerdo- Izana bajó al igual que el azabache quien tomó a nuestros niños- ven aquí, mi reina- me tomó con cuidado entre sus brazos para sacarme del auto y caminar hacia la entrada donde había varios de nuestros hombres- agarren las cosas que quedaron en el auto y súbanla a nuestro piso- ordenó siguiendo a Mikey que ya había subido al ascensor y estaba esperándonos

Solo unos minutos después el albino me dejó con mucho cuidado en la cama, recostando también a los bebés a mi lado y se miraron entre ellos

Creo que tendríamos que traer la cuna aquí, aunque sea hasta que puedas moverte sola ¿Qué te parece, princesa?- preguntó Mikey sentándose a mi lado, tomando mi mano

Sí, eso estaría bien- asentí- no creo poder caminar hacia su habitación- apoyé mi mano libre sobre mi vientre e hice una mueca bajando mi mirada hacia esa zona- aún tengo el vientre hinchado

La doctora te dijo que tardarais en volver a la normalidad, amor...- Izana se sentó también a mi lado y me obligó a mirarlo- has tenido por ocho meses a dos hermosos pequeños creciendo dentro de ti, es normal que tu cuerpo haya cambiado

Pero no por eso dejaremos de amarte- Mikey apoyó con mucho cuidado su mano sobre mi vientre hinchado, que aunque ya no tenía el tamaño que tenía mientras mis dos pequeños estaban dentro, aún seguía bastante grande ¿Y si no podía volver a tener el cuerpo de antes? ¿Y si ellos dejaban de encontrarme atractiva por ello?- borra todos esos pensamientos que están pasando por tu cabeza- lo miré avergonzada ¿Cómo sabía todo lo que estaba pensando?- eres como un libro abierto para nosotros

Y esos pensamientos son estúpidos- asintió Izana besando mi hombro

Me abracé a él quedándome en esa posición por varios minutos hasta que ambos me dejaron sola para ir por la cuna, la cual trajo Mikey mientras que Izana al volver traía el almuerzo en una bandeja, la cual comimos los tres juntos, disfrutando de ese momento de paz, el cual fue interrumpido al poco tiempo por el pequeño rubio que comenzó a llorar

Te lo alcanzaré- Mikey lo tomó de la cama ya que ambos bebés estaban a mi lado recostados y me entregó al más pequeño, el cual enseguida buscó mi pecho, el cual metió en su boca con desesperación

Es igual que Mikey- bufó Izana haciéndome reír

¡Oye!- se quejó el azabache

No te enojes cariño- miré al azabache divertida- después de todo, si lo es, y no solo físicamente, también eres desesperado por comida

Sí, bueno, ¿Te recuerdo quien es el desesperado por lamer y morder tus pechos?- levantó una ceja

Cierra la boca- gruñó Izana- solo estás celoso porque yo si probé lo que nuestros niños iban a comer y en cambio a ti no te dejó