¿Por qué duele sentir?

CAPÍTULO 7, ME PERDÍ EN MI MISMO

Capítulo 7, 

"ME PERDÍ EN MI MISMO"

Aunque mi corazón había madurado, me seguía sintiendo mal, realmente no me encontraba como persona.

Trate de buscarme intentando cosas nuevas, empecé a tocar una guitarra con el anhelo de creer que sería para mí, pero fracase estúpidamente.

También trate de mejorar en mi dibujo, y aunque lo hice, me quede estancado en puro dibujo 2D, nunca pude ejercer bien el dibujo de realismo, lo cual me tenía mal.

Para este momento yo me encontraba trabajando como mesero, la razón por lo que había entrado fue para comprarle un regalo a Fernanda, pero como no se hizo nada, me termine quedando en el trabajo por mero orgullo.

Tenia medio año para trabajar, pues en junio presentaría mi examen de admisión como contador, así que pensé que podría desahogarme trabajando.

Conocí a varios amigos, y para sorpresa de muchos, Alexis, el chico que conocí en la prepa también trabajaba ahí, por lo que hablar con los demás meseros no me fue difícil.

Conocí a chicos como Iván, Samuel, Issac, José, Andrés y Frida que realmente fueron buenos conmigo, me enseñaron a cómo ser mejor mesero, con los demás meseros también hablaba, pero ellos en concreto fueron los que más influyeron en mi desarrollo laboral.

Así estuve durante 3 meses, pero por el cansancio que me generaba estar trabajando, entrenando y aparte lidiando con cosas de mi persona, mi mente estaba realmente muy cansada, por lo que decidí decirle al gerente que me saldría de trabajar, aparte muchos de los amigos que conocí ahí ya también se estaban yendo, pues habían sucedido cosas con uno de los capitanes.

Por lo que termine saliéndome del trabajo.

Pero tiempo después, el capitán me habló, pues se acercaba el día del niño y necesitaban meseros, yo acepté pues varios amigos que se habían ido también volverían, sinceramente solo fui por eso, ese día no me importaba cuanto ganara, solo quería tener una tarde con ellos.

El día terminó y nuevamente dejé de ir.

Las ganas de llorar no se hicieron esperar

Ya había presentado mi examen de admisión, y realmente estaba muy asustado, así que preferí alejarme un poco del celular y centrarme en seguir entrenando, para cuando llegó la fecha de los resultados no quería verla, pero tenía qué.

Aún recuerdo el día, era un sábado por la mañana, estaba con unos amigos en una actividad de "scouts", mi hermano estaba diciéndome a cada rato;

- ¡Fíjate si ya está la calificación! – casi gritándome

En una de esas acepté ver el resultado, me metí a la página con un miedo que recorría m cuerpo por montones.

Al abrir la pagina donde leí un "lamentamos" mi cuerpo se puso tenso, seguí leyendo para confirmarlo, y efectivamente.

No había pasado el examen, no dije nada en ese momento, simplemente apagué el celular y me fui corriendo a mi casa, todos mis amigos se extrañaron, pero mi hermano dedujo el porque de mi actuar en ese momento.

Me sentía devastado, no quería ni ver a mis papás, pues más que regañarme, sabría que iba a decepcionarlos.

Otra vez...

Al final acabé diciéndoles la verdad, ellos no dijeron mucho, pero sus caras expresaban muchas cosas, me sentía muy mal, pues era mi oportunidad de volver a estudiar y la arruiné.

Pasaron los meses y el capitán me preguntó si quería volver a trabajar, se lo acepté y terminé yendo.

Realmente solo quería mantener mi mente ocupada.

Pensé que sería un día aburrido, pues muchos de los amigos que conocí ahí ya se habían retirado también, realmente solo trabajaba para mantener ocupada mi mente y no pensar en la escuela.

Nos dieron nuestras zonas para las mesas, vi que me tocaría con 2 personas que no conocía, uno de nombre Ángel, y una chica de nombre Ashely

No me generaba emoción, pero al menos trate de hablar con ellos para que no se me hiciera pesada la tarde.

Ángel se tuvo que ir para buscar un dinero o algo así, sinceramente no le tome mucha importancia, pero Ashley y yo nos quedamos a cubrir nuestra zona

Era una chica algo tímida, pero fue muy rápido el cómo nos agarramos confianza, literalmente por más pesado que fue el día ella me entretenía, me contaba cosas de su vida y yo le contaba a ella una que otra anécdota.

Hasta que llego la hora de salida.

Yo realmente estaba pensando en si quedarme, pues a veces era mucho el peso que hacíamos como meseros y aparte saliendo a las casi 12pm, para mí no valía la pena seguir ahí.

Por lo que decidí antes de largarme pedirle su Facebook, pues así tendría forma de hablarle aunque sea por fuera, así que así fue, le pedí el Fb y nunca volví a ese trabajo.

Sentía un peso menos la verdad, no sé por qué

Pasaron los meses y volví a otro trabajo, pero ahora como Abarrotero, era un trabajo también pesado, pero era cerca de mi casa, así que no gastaba en transporte, aparte el Gerente era muy flexible, por lo que no tenía problemas con él

Decidí volver a presentar para la misma carrera, esta vez con previo estudio para asegurar el pase, y así fue.

Estaba en el trabajo, yo sabia que ese día darían los resultados, estuve todo el día impaciente, realmente no quería volver a fracasar.

Estando en el congelador de carnes decidí entrar a la página y no lo podía creer.

Había pasado el examen

Había entrado a la carrera.

Me sentía muy feliz y para celebrarlo le hable a mi mejor amigo para ir al centro de mi ciudad

En ese momento no me importaba nada, yo había pasado el examen que era lo que me tenia preocupado todo el año, volví a ser feliz.

Llego Navidad, y supuse que podría terminar este año sin preocupaciones, pues todo lo que había pasado mal, ya había sanado o ya se había arreglado, podía acabar el año sin arrepentimientos.

Hasta ese 25 de diciembre...