Esposa por alquiler//BUENOVELA

Capítulo 6

—¡Lo siento, lo siento! ¡De verdad! ¡No fue mi intención! ¡No veía mi camino porque ando un poco apurada!

—Está bien, está bien—recogió sus papeles y se levantó, sin embargo, cuando quiso ayudar a la castaña de melena larga a levantarse también, ya la vio de pie, mirándolo ansiosa, como esperando algún tipo de regaño de su parte. Por el aspecto pálido y con algo de terror en su rostro ya algo hinchado, decidió tranquilizarla—. Estamos bien todos ¿Ves? No tengo nada lastimado. ¿Qué haces corriendo por los pasillos de esa manera?

—Lo siento—se disculpó por enésima vez desde que chocaron, mientras se balanceaba imperceptiblemente sobre sus pies—. Estoy buscando al CEO, es muy importante porque…

—¿Por qué estás queriendo hablar con el CEO, tanto que chocas contra las personas?

El CEO subió ambas cejas y sonrió con diversión. ¿Y esta simpática mujer de dónde apareció? Es solamente algo triste que tenga algo que estropee sus bonitas facciones.

—No, lo que pasa es que es una emergencia, ayer vine a pedir trabajo y me lo dieron, sin embargo, hoy vine por el primer día y…

¿Trabajo? ¿Ella vino por el trabajo de auxiliar? Pero si ya habían contratado a un joven ayer, ¿Cómo es que se lo confirmaron a esta mujer?

Unos empleados salieron de una oficina al azar, al instante que sonaba el reloj inteligente de su muñeca, con una llamada entrante.

—¿Saben dónde está el CEO? ¿El señor Brake?

—Creo que está en esa segunda reunión…

—¿No estaba ya en la tercera?

—Oh no, yo lo ví en su despacho justo hace unos minutos…

Los ojos de la mujer menuda parecían iluminarse al escuchar la conversación a voces de esos hombres oficinistas.

—¡Lo siento mucho, guapo hombre! ¡Pero, de verdad necesito encontrar al CEO!

Y cómo si nada, comenzó a correr, con algo de dificultad y cojeando, tras los otros empleados.

¿Por qué cojea también? Parece como si tuviera dolor…

—¡No olvides no correr en los pasillos para no volver a caerte!

¿Guapo hombre?

El CEO no guardó esta vez su sonrisa, anotando mentalmente hacerse cargo de ese pequeño malentendido con la castaña y atendió al fin su llamada.

—Black.

—¡Jefe! ¡No lo va a creer!

—Dios mío, Roxy, no grites, te escucho fuerte y claro—hizo una mueca ante su grito estridente e innecesario—. ¿Qué pasó que…?

—¡Jefe, apareció su compatibilidad y es del 99%!

No le importó absolutamente nada, incluso olvidó su propio consejo de no estar corriendo por los pasillos e hizo exactamente eso, hasta llegar a Roxy lo más rápido posible.

(...)

—¿Cómo es eso de que apareció mi compatibilidad?

—Así es, jefe—Roxy lo miró con una sonrisa deslumbrante—. Mire—sacó el expediente de una caja algo grande y colocó los documentos que la mujer firmó encima de la encimera—. Aquí está todo e incluso ya tenemos la firma en la documentación matrimonial.

—¿Lo ha firmado todo?—hojeó todo el documento y efectivamente es así. Pero ¿Por qué no había puesto una foto tipo carnet si era un requisito al bajar el formulario de internet?—. ¿Se inscribió como esposa por alquiler? Así que soy compatible con Harper…