EL ÚNICO OMEGA.

No puedo dejar de pensar en ello.

Narra Camilo.
Es común que al entrar a la adolescencia se hagan visitas frecuentes al médico para asegurarse que todo vaya bien con el celo o el rut, de que los supresores funcionen correctamente, etc. Yo hoy vengo al médico para que preparen todo para darme un collar especial para evitar que me marqué algún alfa, en sí solo se van a asegurar de que no sea alérgico al material del que hacen el collar, para medirme el cuello y hacerme una revisión de rutina. El médico que me atiende es un completo pervertido o al menos conmigo lo es, me mira de manera lasciva y sin mencionar que siempre me toca de más y de forma poco profesional, si él tuviera la oportunidad no dudaría en violarme, ¿pero quién no lo aria?  

Con tengo la respiración mientras siento como su mano recorre mi pecho, sierro los ojos cuando llega a mi cintura y empieza a meter su mano dentro de mi pantalón, lo empujo y salgo corriendo del consultorio mientras me pongo mi camisa, para mi desgracia choco con Tweek y este me mira con enfado, mi plan era ignorarlo y seguir con mi huida, pero la mama del rubio aparece.

Señora Tweak -Hola Camilo, ¿También vienes a una revisión médica? --me dijo amablemente.

Camilo -Sí, de hecho ya me iba y ¿usted?.

Señora Tweak -Yo solo vine a acompañar a mi hijo --acaricia el cabello de su hijo -espero que no te esté causando problemas.

Camilo -No, nos llevamos muy bien, ¿verdad?

Tweek -Si --finge una sonrisa.

Señora Tweak -Que alivio me preocupa que no fuera así, ¿por qué no te pasas por el café uno de estos días?

Camilo -Cuando tenga tiempo lo are --me despido y sigo con mi camino.

Me siento mal por engañarla, pero es mejor a decir que su hijo y yo nos odiamos a muerte, al llegar a mi casa me meto a bañar para limpiar la sensación de estar sucio por haber sido tocado de tal forma, el agua tibia sobre mi cuerpo me ase sentir mejor, pero eso dura poco al recordar que fui al médico y no lo digo por la mala experiencia que tuve con el sino por mi eminente celo el cual no tardara en llegar y arruinar mi vida, una vez que tenga mi primer celo empezaré a emitir feromonas que atraíran a los alfas los cuales interpretaran que es un pase abierto a que hagan lo que quieran conmigo y aunque existen los supresores estos no evitas que no emita feromonas al 100% también empezaré a percibir las feromonas de los alfas las cuelas causaran muchos problemas en mí desde miedo, asco, deseos sexuales y más.

En un pueblo como este estoy seguro de que no sobreviviría a mi primer celo si este ocurre en un lugar público, por lo menos en los demás pueblos los alfas están acostumbras al olor de las feromonas de los omegas, pero aquí no, en cuanto perciban mis feromonas se volverán locos y me destrozaran de tal forma que no viviré para ver salir el sol un día más.

Me acuesto en mi cama y duermo asta el día siguiente...

En la mañana mi madre y yo almorzamos juntos algo que me pareció raro, ya que nunca lo asemos ella siempre se va muy temprano a trabajar, pero hoy no lo hizo y cuando le pregunte solo me dijo que hoy entraría tarde, su tono de vos sonaba distante algo le preocupa; como yo nunca almuerzo me tuve que forzar a comerme todo lo que estaba en el plato y aguantarme las grandes ganas que tenía de vomitar todo, al terminar de comer mi madre llevo los platos al fregadero y se preparó un café al regresar se sentó nuevamente en la mesa.

Cheli -Hijo tenemos que hablar de algo serio --yo tragué saliva al escuchar su tono serio y demandante -eres un omega algo que no podemos cambiar la naturaleza no se puede cambiar y hacerlo implican grandes catástrofes --le toma al café -no tienes otra función más que parir a los hijos de un alfa y servirle para descargar sus instintos sexuales, si murieses no tiene importancia el alfa puede conseguir a cuantos omegas quiera lo que quiero decir es que no desperdicies tus encantos seduce a un alfa adinerado, cásate con él y dale un buen heredero, si te engaña o te golpea solo sopórtalo en silencio.