- Yume. -
La joven de morados cabellos abrió sus ojos con dificultad, mientras veía las borrosas figuras a su alrededor.
- Yume. -
Volvió a ser llamada, obligó a sus ojos a enfocar mejor, comenzando a distinguir la silueta de un joven chico que la rodeaba con sus brazos.
Abrió la boca para intentar pronunciar unas palabras, pero solo sangre salió de esta.
- Eres como un sueño Yume... mi sueño. - Siguió hablando el joven pilar, mientras sostenía a su amada para que no tocará el frío suelo.
Los ojos de la pequeña chica se llenaron de lágrimas, mientras su corazón se estrujaba al notar como la persona más importante para ella también estaba llena de sangre.
- Voy a perder la conciencia pronto... - Susurro mientras la apretaba un poco más contra él. - Y tú también... nos estamos desangrando. -
Unas cuantas lágrimas que no pertenecían a la Mochizuki cayeron en su rostro.
- Por favor... buscame en la siguiente vida... yo quiero... seguir soñando... a...tú... lado... - Fue hablando mientras cerraba los ojos poco a poco. - Yume...te amo...