15.

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Claramente el capítulo tiene un bajón de calidad algo drástico por el tiempo desconectado de la historia, pido una disculpa en lo que me vuelvo a acostumbrar a mi propio estilo común tan.... "floriciento"


- A la izquierda!... No, dije izquierda!....
Tommy, malditasea, la otra izquierda!

La bociferacion ronca hizo gemir con disgusto al puberto de rulos dorados, el cual recorrió el cuadro entre sus manos a la dirección contraria a donde su propia lógica le decía, su cuerpo se tambaleaba torpe sobre la silla de madera vieja que hacia de su apoyo bajo la mirada expectante de Philza, tubbo y un adormilado y poco espectante fundy.

- ¿¡Por qué Blade no hace esto?! Nisiqueira es nuestra casa, que estupidez!

- Técnicamente si es nuestro hogar, así que cállate y acomoda el cuadro, mocoso - Indicó el aviar de plumas negras observando al niño acomodar el cuadro donde una foto de tubbo y Tommy siendo cargados por Technoblade se mostraba con orgullo, para el rubio la foto era cursi, para Philza y Quackity, la foto era oro puro.

- Y por que estamos decorando la casa de techno?

- Fácil, tiene que lucir bonita para la cena

- Cenaremos algo especial?

- Ellos si, tienen una cita

- Puaj... que meloso.

- Si lo es, pero déjalos en paz.

Un quejido galloso más y finalmente el marco de madera rosada fue colocado aunque un poco fuera de lugar, era suficiente por el momento. Suficiente para la bonita morada que poco a poco comenzaba a tomar mejor forma a base de pequeños cambios e integraciones sutiles que daban lugar a una especie de mudanza silenciosa.
Philza estaba feliz de comenzar a formar un lugar propio mucho más cerca de Technoblade, sobre todo ahora que formalmente parecía comenzar a formar algo real con el pato de cabellos oscuros.

Quien lo diría! El gran y duro Technoblade estaba en su etapa de colegiala enamorada enrulando mechones de su cabello rosado sobre su dedo mientras veía al guapo muchacho que le gustaba entrar por la puerta con sus mechones oscuros volando al viendo. La imagen mental le hizo ahogar una risilla boba mientras finalmente recargaba su mano en la silla para ayudar a la estabilidad de esta.

- Bien! Me largo! Es el quinto cuadro que cuelgo esta semana! - Refunfuñó Tommy.

Si; Philza se estaba emocionando un poco con las fotos y las decoraciones que de a poco invadian espacios haciendo la vieja cabaña un lugar mas acogedor, sin duda se estaba volviendo un anciano melancólico, y ahora más que tenía un tiempo mayor en familia con nuevos integrantes y peculiares dinámicas nacientes. Había comenzado a ver como en las tardes de ocio la mesa de technobalde se llenaba de planos experimentales con opciones variadas para ampliar la casa, con más cuartos, luego menos, luego una sala más grande, y luego hasta un área de juegos frente a la cabaña, con ideas para juguetes y repisas, y hasta con una cuna en plan para el pequeño fundy, ideas que iban y venían, llenas de anotaciones y hasta algunos dibujos raros hechos en crayon producto de tubbo encontrándose con las hojas descuidadas.

Si Techno ya tenia planes de darles la bienvenida permanente, ¡Quien era Phil para negarle su presencia!

- Esa foto es mi favorita hasta ahora. - La repentina voz nueva le sacó de sus propios pensamientos cuando Quackity entró a la sala alzando inadvertidamente a Tubbo el cual soltó una risilla, cada herida que antes había pintado su rostro salpicado de lunares ahora solo eran fantasmas cicatrizados o apenas amarillentos de lo que antes eran, una curación paciente y alentadora en un rostro que cada vez tenía más felicidad sobre sí, el cuervo adoraba ver como el brillo le regresaba a los ojos, aun más mientras vestía elegante la camisa qué le había prestado junto a unos bonitos pantalones cómodos.

- Abejas en la nieve -  <Quacknoblade>  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora