CAPÍTULO 16

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Intento tragar la menor cantidad de agua mientras mi cabeza sigue bajo esta. Unos brazos rodean mi cintura y me levantan sacando mi cabeza a la superficie. Toso varias veces cuando consigo respirar, todavía con los ojos cerrados, aunque se que es Pedri el que está en la piscina conmigo haciendo pie, y como yo no toco suelo, enredo mis piernas en su cintura. Me agarra de los muslos para que no me aleje y me hunda.

-¿No sabes nadar?- Se ríe el canario frente a mi, que sube una de sus manos para apartar el pelo mojado de mi cara, y solo entonces abro los ojos para mirarlo con rabia.

-Claro que se nadar idiota, pero me ha pillado de sorpresa y con las zapatillas puestas.- Le digo furiosa mientras le lanzo un poco de agua. Se ríe ante mi comportamiento infantil.

-Y por eso sigues subida encima mía.- Dice en tono socarrón con una sonrisa. Ruedo los ojos y me dispongo a alejarme de su cuerpo cuando sus manos aprietan mi muslo y mi cadera y no me deja separarme.-Yo no he dicho que quiera que lo hagas.-

-¿A qué juegas Pedro?- Sus facciones se vuelven neutras cuando lo llamo por su nombre. Entre cierra los ojos.

-¿Perdón?- Pregunta confuso, sin terminar de entender lo que quiero decir. Suspiro y me paso una mano por el pelo, para después descansarla en uno de sus hombros.

-¿Qué quieres de mí?, fui a tu casa estando enfadada solo para hablar contigo como dos adultos maduros, te explique lo que pasaba y te pedí ser amigos, ¿Tan difícil es de entender?- Pregunto ya desesperada, y por un momento pienso que me va a dar la razón.

-Es que no lo entiendo Jud.- Dice alzando la voz, casi enfadado.- No somos los putos protagonistas de Romeo y Julieta. Nuestra familias no están enfrentadas, no soy el novio de ninguna de tus amigas y vivimos cerca. Si me hubieras dicho que el problema está en que no te gusto lo hubiera entendido pero no es así. Me gustas, y tú no paras de demostrarme que yo te gusto, no entiendo dónde esta el puto problema. Pareces empeñada en crear una barrera de amor imposible entre nosotros para tener la trama perfecta y escribir un libro joder, es que ya no sé que más hacer.- Suena realmente cansado, cómo si se hubiera preparado ese discurso.

Me quedo totalmente callada, y es que realmente no sé qué decir. Las palabras se quedan atascadas en mi garganta porque saben que tiene razón. Pedri tiene razón. Llevo desde que lo conocí empeñada en que no tengo que crear un vínculo con él, pero ahora mismo no encuentro la razón de porque.

-De verdad Jud, si el problema es que no te gusto dímelo y me iré corriendo, pero no me digas que no quieres una relación y luego salgas con Diego ¡Joder!, es que me muero de celos con solo pensarlo. ¿No ves que me tienes loco?, ¿Hace falta que me lo escriba en la frente?- Sigue hablando al ver que no respondo, pero soy incapaz de hacerlo. Le miro a los ojos, tiene el rostro y el pelo mojado por culpa del agua de la piscina, y en ningún momento me ha soltado, a pesar de parecer enfadado. Suelta una risa irónica.-Ya... me lo imaginaba.- Niega con la cabeza totalmente decepcionado y mi corazón se rompe.

Suelta mi cuerpo delicadamente y tengo que mover mis piernas para flotar. Va andando hasta el borde de la piscina y sube las escaleras sin mirarme. Me quedo en medio de la piscina mirándolo como una tonta, no puedo reaccionar.

Durante todo este tiempo he rechazado la idea de estar con Pedri por miedo, por su fama, por cobarde. Y cuando lo veo alejarse, no puedo evitar pensar que es el final, y mi tripa empieza a doler cuando contemplo la idea de no volver a verlo mucho más. No puedo dejar que se vaya.

-¡Tengo miedo!- Grito desde el interior de la piscina, intentando que me escuche aunque ya esta demasiado lejos. Pero escucha un murmullo, y se gira. Sabe que he dicho algo.

-¿Qué?- Dice confundido, y se queda parado en medio del jardín. Nado con rapidez hasta la orilla de la piscina y subo por la escalera. Me acerco a paso rápido hasta él notando como mis zapatillas chapotean por culpa del agua, y sé que toda mi ropa se pega a mi cuerpo, pero con él me da igual.

Caricias | PEDRI GONZALEZ //+18// Donde viven las historias. Descúbrelo ahora