Draco siempre fue conocido en Hogwarts por ser un doncel intocable, era mil veces más fácil intentar robar en Griggots a que alguien se intentará sobrepasar con Draco Lirius Malfoy Black
El bonito rubio tenía cientos de pretendientes, tanto dentro de la escuela como en otros lados, su familia se encargó de que todo el mundo conociera el nombre de Draco Malfoy, alguien intocable en simples palabras
Grande fue la sorpresa para todo el mundo mágico al ver como Draco Malfoy, aparecía en el Gran Comedor con un chupón de color rojizo y levemente púrpura en el contorno, en su largo y delgado cuello
Todos los Slytherin se amontonaron a su alrededor para descubrir quién era la persona que tenía el valor suficiente para tocar a alguien como Draco Malfoy y más aún cómo para dejar marcas del acto que nadie creyó que ocurriría, al menos hasta salir de Hogwarts
Draco solo levantó su mano con elegancia e hizo callar a todos
—Dejen de preguntar, no les diré
Y con eso, Draco se levantó de la mesa para salir del Gran Comedor con su sonrisa en sus labios mientras tocaba levemente aquella marca en su cuello
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Ya habían pasado 3 días desde aquel pequeño incidente en el Gran Comedor, todos estaban pendientes de quién podría ser la persona que le hizo aquel chupón al intocable Malfoy
Nadie sabía quién podría ser, todos eran lo contrario al tipo de cosas que le gustaba al bonito y delicado rubio
Slytherin... Nadie había salido al mismo tiempo que Draco...
Ravenclaw... No, los cerebros de Hogwarts no eran el tipo de Draco...
Hufflepuff... De sólo pensarlo querían reír a carcajadas...
Gryffindor... Aún menos posibilidades que los tejones...
Todos estaban tan al pendiente de descubrir todo aquel misterio que nunca notaron como Draco se iba caminando con cierto pelirrojo de la mano, de como esté lo acolarraba en la pared más cercana y como succionaba su cuello dejando salir jadeos y pequeños gemidos de los labios rosas de Draco
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Ya llevaban una semana entera pensando en las posibilidades de quién era la pareja de Draco cuando Ron Weasley paso a su lado con una leve sonrisa y los labios algo hinchados y rojizos, pero al ser Gryffindor todos las serpientes lo ignoraron, de igual manera que ignoraron el sonrojo en las mejillas de su príncipe
Draco sólo río de buena manera
—Ustedes terminarán por descubrir cada secreto de todo Hogwarts antes de descubrir quién es esa persona
—¿Alguna pista? –pidió Parkinson–
—¿Pista? –el rubio comenzó a morder su labio levemente– le gusta el Quidditch
—¡Eso es más de la mitad de Hogwarts! –reclamó Zabini–
—Bien... No diré casas ni nada, sólo que va en sexto
Y con eso, se fue a la biblioteca para estudiar
—Eso quita a muchos –habló Nott–
—Pero, quedan más de 60 personas –terminó de hablar la azabache–
Los tres se miraron y suspiraron cansados, eso sí que ayudó en su búsqueda
Pero aún les quedaban muchos estudiantes que asegurar de que no tenían nada con Draco...
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Ya llevaban a la mitad de sexto de todas las casas, sólo quedaba unos pocos de Hufflepuff y los de Gryffindor
Pero eso no fue necesario al ver como Draco se besaba como si nada con Ronald Weasley...
¿¡Weasley!?
—Oh, arruine su búsqueda –habló el rubio separándose de su novio–
—¿Búsqueda? –preguntó el pelirrojo con duda–
Draco solo tomó su mano y comenzó a caminar con él
—Nada, amor, nada
Los Slytherin se quedaron de pie viendo en dirección a la pareja irse como si nada mientras se besaban al caminar
Tal vez no era lo que esperaban para Draco, pero si Weasley pudo hacer algo cómo para tener al intocable Draco Malfoy llamándolo "amor", tal vez debían aceptarlo y dejarlos vivir su amor...
Aunque eso, lógicamente, no evitó que Draco apareciera con chupones de vez en cuando, junto a que Ron también tenía marcas en su cuello
Y la cereza del pastel, el beso que ambos se dieron al inicio de las vacaciones de verano
Lucius Malfoy no estaba contento con la relación de su hijo, pero sabía que no podría negarse a algo como la felicidad de su hijo, al igual que Narcissa
★★★
Hey baby's
Nuevo One-Shot de Draco Bottom
Y como encuentro que el Ronaco tiene pocas historias, escribiré más
¡Bye Bye, Muy Lovers!
